En Huesca sobran las confianzas
No hace mucho que el Valladolid visitó Huesca. Fue a finales de mayo, con el equipo que entrenaba Onésimo ya salvado y con los de Abel obligados a ganar para no depender de la última jornada ante el Alcorcón. El Valladolid acudía como favorito a campo de un modesto que tenía los deberes hechos. Y se falló. Estuvo más intenso y enchufado el equipo aragonés y por eso ganó. Lo de esta tarde en El Alcoraz es muy distinto. El mayor peligro para el Valladolid va a ser él mismo. Si los de Djukic salen confiados pensando que van a ganar al colista sin bajarse del autobús, ahí empezarán a perder el partido. Visitar a un colista que tiene una sola victoria parece la situación ideal para ganar, pero sólo cuando se mantenga la concentración al máximo y se corra, por lo menos, lo mismo que el rival.El Valladolid es mejor, mucho mejor, y debe imponerse. Pero en este tipo de partidos se manifiestan los más inoportunos 'gatillazos'. Un aspirante a subir de manera directa tiene que empezar a ganar también fuera. Desde que se logró la victoria de Tarragona en la primera jornada no se ha vuelto a ganar lejos de Zorrilla. Y ya es hora. Esperemos ver a un equipo convencido de sus posibilidades y que sigue dando la cara cuando el club más está sufriendo en el aspecto económico.