Fiesta en la habitación 522

Fred tiene fama de ser un tipo divertido y bromista entre sus compañeros. "Tengo sentido del humor y sí, la fiesta suele organizarse en mi habitación. Pero con Robinho y Neymar en la concentración, hay veces que tengo que echarlos de la habitación porque quiero descansar. No se cansan de gastar bromas", apunta el delantero de Fluminense.

La hipótesis la confirma Rodrigo Paiva, jefe de prensa de la Confederación Brasileña: "Neymar es más parecido a Robinho que a Romario o Ronaldo. Está siempre sonriendo y gastando bromas. Cuando se unen los dos, la diversión está asegurada". Lo cierto es que los dos delanteros del Santos, además de ocupar el foco de las miradas de la prensa desplazada al exclusivo Resort Los Cardales, a 60 kilómetros de Buenos Aires, son el alma de la concentración. Los 23 internacionales brasileños recorren los apenas 300 metros que separan el gimnasio de los campos de entrenamiento diariamente en dos camionetas. Es sencillo saber en cuál van Juninho y Príncipe, Neymar y Robinho, respectivamente. Sentados en las últimas filas, protagonizan la mayoría de las chanzas que sus compañeros soportan con paciencia mariana. El síndrome de Peter Pan posee a ambos, que sólo borran la sonrisa de su cara cuando Menezes se dirige a ellos para realizar alguna corrección. Son Neymar y Robinho, las pesadillas del divertido Fred. Los animadores de la fiesta perpetua de la habitación 522.