Liga BBVA | Villarreal - Real Madrid
Contra Villarreal, Barça, Messi, Hugo y Zarra
Los retos de Cristiano abren el apetito blanco ante un rival cansado
El Madrid ha encontrado en el Pichichi de Cristiano algo que le abra el apetito. Una pedrea vestida de gordo, una posibilidad de victoria parcial sobre Messi y el Barça, un punto de partida para el futuro. Y en ese todos para uno anda implicado el equipo, buscando consuelo colectivo en un premio individual. Al Villarreal le cuesta más motivarse. Está atrapado en una encalmada y se nota: dos 0-0 en los últimos dos partidos, marcador en las antípodas de su modelo. Jugará la Champions y está tan en paz consigo mismo (y tan cansado) que se ha quedado dormido.
Cristiano, en cambio, llega a ritmo de vuelta rápida: doce goles en sus últimos siete partidos que le han puesto a dos del récord de Zarra y Hugo (38) con dos partidos por delante. Está en la puerta del hall of fame. Saldrán, pues, él y diez más para hacer de liebre.
También hay horizonte para Özil. Ayudarle a Cristiano es ayudarse a sí mismo. Suma 16 asistencias y sólo tiene a Messi por delante, con 19. El óscar al mejor secundario está a su alcance si Mou le prefiere a Kaká. Ha dado seis goles en los últimos tres partidos. Cristiano estará más tranquilo con él a su lado. También con Benzema, el nueve de la segunda vuelta. Y con Xabi y Granero, juntos por tercera vez. Con ambos al timón el Madrid metió ocho al Levante en Copa y ganó en Santander (1-3) en Liga, en tarde de tiqui-taca. Luego Mou no ha vuelto a ascender por esa cara, que siempre vio arriesgada. A tiro está también marcar más goles que el Barça (van 92 a 91), tarea impensable hace dos meses.
El Villarreal vestirá de gala, pero bajo los efectos de la fatiga, que en fútbol es enfermedad de ricos. Ocho de sus futbolistas superan los 50 partidos. Rossi y Cazorla, los 60. Cosa de alargarse en Europa y de llenar la plantilla de internacionales. El partido tiene miga para Rossi, tentado por el Barça. Buena ocasión para familiarizarse con la rivalidad venidera. Para ser tercero el Villarreal necesita ganar los dos partidos que restan y que el Valencia no sume un punto. Cosas más difíciles se han visto.