NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

Deportivo - Real Madrid | La contracrónica

Murieron de pie...

La maldición de Riazor resucitó en un partido en el que sobraron Kaká (el Madrid jugó con diez hasta su cambio) y los postes de Aranzubía. El infortunio del Madrid es digno de estudio. Siete puntos de brecha. Esto se pone feo.

Actualizado a
Murieron de pie...

¡Qué injusticia!. Un equipo que lanza más de veinte disparos a gol, que acaba el partido con siete jugadores de ataque puro y duro, que no permite que sepamos el color del jersey con el que saltó Casillas al campo, que se encuentra con dos postes que se añaden a los otros dos que tuvo en Lyon... Efectivamente, no existen las meigas, pero haberlas, haylas. Que se lo digan a Benzema, que inventó una jugada sin precedentes en la historia del fútbol. Remató a gol con su pierna derecha y cuando la pelota iba a entrar, su pierna izquierda se disfrazó de central y sacó el esférico para alucine de los 35.000 hinchas que abarrotaron Riazor. Jugada de Poltergeist. Karim, mírate el vídeo.

Orgullo vikingo. En la noche en la que posiblemente se perdió defitivamente la Liga, no veo un solo madridista que esté enfadado con su equipo. Los que empataron 0-0 ante el Depor fueron dignos jugadores del Madrid. Valientes en el desempeño, ambiciosos, verticales, directos, insistentes y atrevidos. Cuando se muere de pie y con las botas puestas (esto es fútbol) sólo queda aceptar la cruda realidad y no darle más vueltas. Si encima el rival tiene a un ex canterano del Madrid como Laure que parecía un Chendo de sus buenos tiempos multiplicado por diez (Laure...ada) y un porterazo que evita los goles igual que los mete, es estéril seguir dándole más vueltas. Los chicos de Lotina jugaron con un ardor admirable (ante el Madrid ya se sabe que eso siempre está incluido en el menú de la carta) y esta vez ni el histórico taconazo de Guti hubiera evitado este empate que sabe a hiel.

Sin pólvora. El Moumadrid se ha dejado esta Liga en Mallorca, Ciutat de Valencia, Pamplona, Camp Nou y Riazor. Cinco salidas, cero goles. Y pensar que ayer Raúl firmó su gol número 14 en el Schalke, lo que le sitúa como cuarto artillero español de la temporada por detrás de Villa, Pedro y Negredo... A eso añadan los puntos perdidos en Almería (1-1) y entenderán que la brecha de siete con el Barça era inevitable. Esto no está acabado, pero es más lógico empezar a poner los cinco sentidos en la final del 20 de abril y en esa vuelta con el Lyon del 16 de marzo. El Madrid está vivo en la Champions y tiene la Copa a noventa minutos. La Liga debe ser el hilo conductor para mantenerse competitivo. Hasta el rabo, todo es toro.

Borbalán... Perdonó a Lopo una amarilla nada más empezar la velada pese al entradón a Cristiano. Por eso no me sorprendieron los posibles penaltis del final. Mano pegada al cuerpo o no, era mano y el balón iba a gol. Y a Benzema le dan por detrás antes de disparar en el último suspiro del duelo. Pero ya ni me quejo. Va en el lote. Nadie imagina un coche sin volante. Ni una Liga sin Villarato...

Ilusiones rotas. El viernes cené con la peña Tívoli en un restaurante que parecía premonitorio: Riazor. Los ánimos de ese humorista eterno, Quique Camoiras, se me añaden a las palabras de aliento de Javi y Fernando de Zamora, Víctor de Villa de Recas, Paco de Hoyo de Manzanares y las peñas Alirón de Olvera (Cádiz), Río Esgueva (Valladolid), La Najarra de Almuñécar y Huetor Tajar (Granada), El Puchero de Castellar y Villarrubia de los Ojos (Ciudad Real) y Benicarló (Castellón). También me consuela el nuevo golazo de Jesé con el Juvenil de Tristán Celador (3-0 al Toledo ayer) y esa manta que AS les ofrece desde hoy. Adquiéranla, amigos. Toca abrigarse...