El carrusel

EL PERSONAJE: LASS

El Madrid no es un zoológico, aunque las metáforas mal entendidas y peor expresadas de su técnico puedan hacer pensar lo contrario, pero si hubiera que añadir otro animal a gato y perro ese sería la pantera. La pantera de Lass, por supuesto. El francés se ha multiplicado en los últimos partidos tras el voto de confianza que le ha dado su técnico. Ha costado que este matrimonio encontrara los vínculos de unión. Incluso el mediocentro mandó a su agente mover los hilos por si tuviera que buscar una salida en diciembre. Pero su encaje en el esquema de Mourinho era un hecho. Sobre todo tras el naufragio del Camp Nou. Lass no pierde el sitio y aparece por sorpresa. En este dibujo es feliz. Sonríe. Participa. Destaca. Y Mourinho tiene un candado más seguro.

La sinfonía que Messi interpreta según su inspiración

El Barça volvió a recitar la misma sinfonía a la que nos tiene acostumbrados. La orquesta es tan perfecta que suena dulcemente allá por donde pasa, cualesquiera sean los rivales, llueva o nieve, llegue 45 minutos tarde o el día antes. Xavi lleva la batuta y Messi es el instrumento estrella, el artista al que hay que dejar a su libre albedrío para que suelte esa divina inspiración. El argentino hace lo que quiere sobre el campo. Con el juego y con sus rivales. En el primer gol desactivó toda la defensa con un pase interior -como hiciera dos veces ante el Madrid- pero esta vez se sumó a la fiesta goleadora con dos obras de arte. La primera en asociación con Alves y la segunda en un solo que al que le faltaron pétalos de rosa. ¿El fútbol es caro? No por ver ayer a Leo.

Sólo el Kun podrá situar su techo

Agüero se convierte poco a poco en historia viva del Atlético. Partidos como el del sábado ante el Depor le sitúan como el actual emblema de una entidad por la que pasaron muchos otros grandes. Pero tal exigencia se ve correspondida por la talla futbolística de este menudo delantero sin límites a la vista. Cuando saltó por primera vez a un campo de fútbol con Independiente, en 2003, de la mano de su técnico Ruggeri, tenía 15 años y 1 mes. Se convirtió entonces en el futbolista más joven en debutar en una liga habitualmente poblada de otros muchos talentos precoces. El suyo no fue uno más. No. Los aficionados del Rojo y de las categorías inferiores de Argentina pudieron disfrutar de una de las apariciones más espectaculares que jamás hayan surgido en aquel país. No fue un espejismo. Desde que llegara al Atlético su nivel ha ido creciendo año tras año hasta adquirir el actual. Los goles ante el Depor no los marca cualquiera. Sólo alguien que se sabe el elegido. El decisivo. El mejor. Por eso su techo parece tan lejano. El propio Kun dictará cuánto .

Ansiedad por sacar lo que hay dentro

Ahora que se acercan las Navidades uno se acuerda de esos inocentes niños que abren sus regalos con ansiedad, incapaces de poner orden a sus acciones cuando la felicidad les desborda. Kiko Femenía podría ser uno de ellos. El extremo derecho del Hércules es un diamante que ante el Málaga, como ante la Real semanas atrás, devolvió la sonrisa a su equipo cuando la había perdido. Esta vez, con golazo incluido. El internacional en categorías inferiores había sido protagonista por sufrir ataques de ansiedad en medio de los partidos. Nada grave. La única ansiedad que le persigue es su ímpetu por conocer todo lo que hay dentro de él. Como a los niños. Y es mucho.

El gol de falta premia todas las horas extra

Los teóricos del fútbol han inventado hasta muñecos de plástico que conforman barreras con las que hacer más realistas los lanzamientos de falta en los entrenamientos. Casi todos ellos acaban sin cabeza, por cierto, lo que demuestra que es una suerte que conviene practicar con mimo. A los lanzadores no les importa. Incluso hacen horas extra tras las sesiones y se quedan disparando en solitario para prosperar. Y es que ninguna otra acción en un deporte de equipo como éste se resuelve de forma tan individual. Por eso los focos en San Mamés fueron para David López. Su golazo llegó, seguro, tras innumerables horas de trabajo. Y de más de una simbólica barrera decapitada.

La dureza a la que el chico malo burlaba

Cata Díaz es, probablemente, el jugador de la Liga que más pánico produciría de cruzárselo por la noche en el metro. Hay pocos con su tez seria y picada, pocos que recuerden más al eficaz conductor de una banda de gángsters. Su físico parece hecho para trabajar de sol a sol en los inmensos viñedos de Catamarca, la provincia argentina de la que procede y que da nombre a su apodo. Esa cruda personalidad la exhibió con violencia en su expulsión ante el Villarreal. Pero, curiosamente, no es lo habitual. La del sábado fue la primera roja que ve en España y la quinta en sus 343 encuentros al primer nivel. Villa lleva las mismas en 332 y Cristiano una más en 264. El fútbol y sus contradicciones. El Cata y su etiqueta. Aunque esta vez la hiciera buena.

PIATTI: prematuridad por suceder a Messi

Argentina es un país en el que se sienten las cosas con pasión. Allí no se vive, se compite. Se compite por todo. Hasta por ver qué padre deja primero a sus hijos en el colegio. Por eso ya ha comenzado la pelea por descubrir al nuevo Messi. Aún no se sabe si hubo o habrá nadie como él, pero el país lleva tiempo buscándole sustitutos. Y eso que Leo aún tiene 23 años. Pero así es la carrera por los granos de oro. No hay pausa. El mejor colocado es Piatti, el zurdo del Almería que en el Pizjuán dejó su actuación más messiniana desde que llegara hace dos años como fichaje más caro de la historia del club. Ahora, a los 21, necesitaba un partido como éste para seguir en lo alto de esta particular y dudosa carrera por la sucesión. Y es que por detrás ya amenazan Forestieri (20), Lamela (18), Araújo (18), Iturbe (16), Vadala (12)...

Superar una lesión no hace olvidar el peaje

La vida de un futbolista de élite es placentera. Dinero, fama y tiempo libre la conforman. Una ecuación que les convierte en la envidia del resto. Pero también hay momentos duros. Tiempos de superación mental. El mayor reto son las lesiones de gravedad. De hecho, es el gran problema a evitar, pues es un agujero del que es difícil salir tal y como se entró. Por eso ver al racinguista Óscar Serrano regresar tras siete meses ausente por una rotura del cruzado es motivo de celebración. Y mucho más al ser el autor del gol en la importante victoria del Racing a domicilio. Sólo él sabe las largas horas que ha pasado recuperándose con el fisioterapeuta. O las dudas que le surgieron. O la envidia que le corroyó desde el otro lado de la valla. Ayer volvió a su lugar, sí. Aunque, tras este largo tiempo, quizá su vida ya sea diferente para siempre.