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Khedira

"La comunicación con Xabi va de bien a mejor"

Mourinho dijo de él que fue el mejor del partido ante el Hércules. Es un hombre de equipo, imprescindible para que brillen los demás, y Xabi, su gran aliado en el campo.

¿Por qué le costó encajar en el equipo al principio?

Un poco por el idioma. Ahora la comunicación con el entrenador es impecable y sé perfectamente lo que quiere. Trabajo con una empresa alemana que tiene un método novedoso de enseñanza de castellano. Convivo varias horas al día con un español. Desayunamos, almorzamos después de los entrenamientos. Hacemos cosas juntos, y así se avanza más rápido. También influyó la diferencia entre el fútbol español, que es más rápido, y el alemán.

¿Qué le pide Mourinho?

Espera de mí que construya un eje importante junto a Xabi. Es difícil explicar la función exacta. Hay que hacer fuerte el eje del equipo, hacer jugar y defender, que el equipo esté siempre junto, sin espacios Una buena defensa gana títulos.

Xabi, jugador de gran calidad, juega más atrás que usted. ¿No debería ser al revés?

Xabi y yo nos complementamos perfectamente. Es excelente, muy preciso en el pase y con un gran disparo de 25 metros. Pero en el momento en el que existe un hueco en la parte de arriba yo sé que tengo que estar ahí y voy. Y al contrario también ocurre. En realidad, los dos tenemos las mismas funciones. Estamos pendientes el uno del otro. Es como un juego dentro de un juego.

¿Se complementan bien?

La comunicación va de bien a mejor. Nuestros movimientos se han automatizado, y cada uno sabe lo que tiene que hacer y en qué momento y en qué lugar hemos de estar. A Xabi siempre lo seguí en los partidos de la Champions. Es un gran estratega en el campo, inteligente y luchador, alguien de quien se puede aprender mucho. Tiene todo lo que ha de tener un gran futbolista.

¿Cómo se enteró de que el Madrid le quería?

Me informó mi agente.

Sorprendió mucho que visitara a Mourinho en Valdebebas siendo jugador del Stuttgart. ¿Cómo entró?

¡Es secreto! Por la puerta trasera (risas). Aún no había empezado las vacaciones y Mourinho ya había contactado conmigo por sms. Me intrigaba saber qué quería de mí.

¿Cómo fue la conversación?

Fue un encuentro corto. ¡Me convenció en tres minutos!

¿Amor a primera vista?

Efectivamente (risas). Fue muy convincente.

¿Era como se esperaba el vestuario del Madrid?

Todo es más grande y aparatoso que en Stuttgart. Me impresionó. Es más profesional y agradable. Y hay una gran atmósfera. El hecho de haber jugado con algunas de las estrellas de España me hizo prepararme mentalmente. Luego, cuando llegué, me pareció una gran familia.

¿Quién fue su gran ejemplo de la infancia?

Sólo hay uno, Zidane, es el único.

¿Cuándo empezó a verlo?

En el Mundial del 98. Yo tenía 11 años. Aquella era una gran selección. Y entonces vi lo genuino que él era.

¿Y sus primeros recuerdos del Real Madrid?

De ver la final de 2002 ante el Leverkusen. Aunque siempre estuvo presente en mi vida, como en la de todos los niños. La información que genera en Alemania es constante.

¿Cómo se sintió cuando le comparaban con Ballack?

Ballack se lastimó antes del Mundial. Fue mala suerte, y más como capitán que es él. Nos puede pasar a todos. Yo quería que me viese la gente, mostrarme al mundo. Y sabía que era mi oportunidad. No intenté imitarlo, sólo complementarlo con mi estilo.

¿Necesitaba Alemania prescindir de Ballack como España de Raúl para dar un paso al frente?

(Piensa) ¡Eran casos diferentes! Ballack estaba lesionado. Lo de Raúl fue porque había jugadores más jóvenes. Parece como si ya no fuese a jugar más, y no es así. Sigue siendo nuestro capitán. El deporte a veces es así, cuando un jugador no está bien, el espectáculo debe seguir...

¿Qué supuso para Alemania que la selección fuera tan joven y llena de mestizajes?

Lo más bonito es que el fútbol une a la gente. Para nosotros fue una responsabilidad representar a Alemania en este momento porque sabíamos que fuera del campo se estaba creando algo especial socialmente hablando. El mundo entero vio otra imagen de Alemania, no esa típica que todos tienen en la cabeza. Una imagen de un equipo variopinto, joven, talentoso y que sirve como ejemplo. Y con alegría de vivir sensaciones buenas.

¿Sigue la política?

Obviamente. Es un tema importante, ¿no? Un momento increíble fue cuando la señora Merkel se acercó al vestuario y le tendió la mano a Özil. Fue algo para recordar. Todos alucinamos con esa situación.

¿Es religioso?

Musulmán.

Aquí está arropado: Özil, Diarra, Benzema ¿Hacen algún ritual antes de los partidos?

Eso es personal de cada uno. Yo no me lo tomo muy en serio. Cumplo la normativa y los rituales habituales, pero no hago nada que pueda ser exclusivo antes de los partidos.

Su madre es alemana y su padre tunecino. ¿Cómo se conocieron?

Mi padre visitó a un amigo que estaba casado con una alemana. Fue su primera toma de contacto. Y ya se quedó allí. No hablaba nada de alemán.

¿Qué le cuenta de aquello?

Que fue duro. Pero es un ejemplo de superación. Trabajó en una empresa metalúrgica. Me sirvió de ejemplo de que algo imposible se podía convertir en algo posible.

¿Su padre jugaba al fútbol?

Sí, era portero, pero nunca llegó a ser profesional.

¿Cuál es el mejor consejo que le dio?

Los valores de la vida. Sobre todo que tenga sinceridad y que persiga mis sueños. Me insistió en eso. Influyó directamente para que creciera mi motivación: así entré en la selección y en el Madrid.

Usted entró en la Academia del Sttutgart con ocho años. ¿Era más corpulento que los otros chicos, como ahora?

Sí, siempre he sido uno de los niños más grandes. Todo el mundo estaba diciendo que tenía un problema con la velocidad. Parecía que lo hacía todo de forma lenta porque era grande. Luego, me hicieron unas pruebas y se comprobó que era de los más rápidos. Todo el mundo me pidió disculpas.

Vuelve la Champions: ¿Hay posibilidades de ganarla?

Seguro, y eso sería convertir en realidad el sueño del entrenador y de cada uno de los jugadores porque es el reto número uno. Queremos ganar el máximo número de títulos.

¿A quién le daría el Balón de Oro este año?

Es muy complicado. Xavi, Sneijder Hay varios nombres y son muy buenos jugadores todos, y todos estuvieron en el Mundial haciendo un papel importante. A mí me encantaría que se lo llevara un alemán...