"La normalidad engrandece a Leo"

¿Regresó el mejor Barça ante el Panathinaikos?

Nos salió un partido redondo y cuando más lo necesitábamos, viniendo de dónde veníamos.

¿Se sintieron cuestionados tras el 0-2 ante el Hércules?

No. Son las cosas del fútbol. Ya sabemos cómo funciona. Lo del Hércules fue un accidente. Quedó demostrado con el partido que hicimos contra el Panathinaikos. El grupo nunca perdió la confianza y sabe que esto no será sencillo. Pero, en circunstancias normales, tienen que salirnos más partidos como el que hicimos en la Champions que no el que salió ante el Hércules.

¿Le sorprendió la trascendencia que se le dio a esa primera derrota?

No, tampoco. Sabemos que en el Barcelona el nivel de exigencia es muy alto. Es normal que un equipo como éste tenga la presión que tiene a su alrededor. Cuando el Barça sale al campo tiene que ganar siempre. Y eso es lo que se le exige. Pero lo que cuenta es que nos sobrepusimos a ese traspiés en la Liga en tres días.

Con cinco goles, y los que pudieron ser...

Si miras las estadísticas de ese partido son brutales. Marcamos cinco goles, fallamos un penalti, el mejor de ellos fue el portero... El juego fue muy bueno y tuvimos muchísimas llegadas a la portería rival.

¿No les afectó el gol tempranero del Panathinaikos?

Empatar tan rápido fue importante. Ellos se replegaron muy atrás, al igual que hizo el Hércules, pero supimos romper el cerrojo. De todas formas la derrota en la Liga sirvió para cohesionar todavía más al grupo.

Se estrenó usted como azulgrana en la Champions.

Estoy feliz por haber marcado ese gol, pero más por haber contribuido a la primera victoria en la Champions.

¿Echaba usted de menos esa competición?

Llevaba unas temporadas en el Valencia en que se nos resistía entrar en esa competición. Por suerte vuelvo a jugar en ella, y también el Valencia, que es donde se merece estar.

¿Será ésta una Liga de dos si ustedes mantienen su nivel y el Madrid es, como mínimo, tan competitivo como la temporada pasada?

Normalmente, Barça y Madrid son los dos equipos más fuertes. Pero dos jornadas son muy pocas para sacar conclusiones. En ese sentido, la Liga se encargará de poner a cada uno en su sitio.

Precisamente les toca visitar a un equipo, el Atlético, que parece querer presentar su candidatura a la Liga.

Será un partido complicadísimo, pero nos llega en un buen momento. Sé que al Barça se le suele atragantar ese campo, pero ganar allí nos vendrá bien para afianzar nuestra moral.

Y a usted se le da especialmente bien el Atleti...

Sí, pero repito que no será un partido fácil ni mucho menos.

Sea como fuere, ¿prevé un partido de ida y vuelta entre dos equipos que si algo son es ofensivos?

Bueno, cuando esperas algo del fútbol suele ocurrir lo contrario. La clave estará, quizás, en una buena defensa.

Y en un buen Messi. ¿Es tan bueno como parece?

Sí, lo cual es tres veces más agradable porque todo lo que hace me beneficia, pues juego en su mismo equipo (risas). Las cosas que hace son increíbles. Es un tipo súper humilde. La normalidad es lo que lo hace grande. Piensa en el grupo y se hace querer y apreciar por el resto de compañeros.

¿Qué tal sus primeras experiencias en Barcelona?

Estoy muy feliz, y muy acoplado al club, a la plantilla, a la ciudad... De hecho, acoplarse a una ciudad como Barcelona no tiene ninguna dificultad. Además está muy cerca de donde yo vengo.

Acoplarse al equipo habrá sido sencillo, habida cuenta que conoce bien a los Iniestas, Xavis y compañía...

A ver, digamos que no es tan fácil. Se me ha hecho menos complicado. Pero sí, es cierto que conozco bien a Andrés y Xavi. Llevo con ellos cinco años jugando en la Selección y sé bien cómo piensan a la hora de jugar.

Hablemos de su entrenador, Pep Guardiola. ¿Hay para tanto?

Es una ayuda continua para nosotros. Siempre le agradeceré lo que hizo por mí antes de ser jugador del Barça. Responde ampliamente a todos los elogios que se le hacen. Todo lo que se dice de él no es casualidad. Es como es y trabaja como trabaja: cumple las expectativas. Es de agradecer su manera de ser. Sabe que la unión es la verdadera fuerza de este grupo.

Todavía queda un poco para ese partido, pero ¿qué cree que sentirá cuando se enfrente a su ex equipo?

Espero que sea un gran encuentro y seguro que será especial. Ya he vivido experiencias similares, cuando siendo jugador del Valencia me enfrenté al Sporting o el Zaragoza. Esos equipos son mi pasado más reciente.

¿Guarda buen recuerdo de su época en el Valencia?

Por supuesto. Salí muy bien de allí y sigo teniendo contacto con mis ex compañeros de equipo. De hecho mañana (por hoy) iré a almorzar con uno de ellos (risas).