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Liga BBVA | Racing

Luis García negocia con el Panionios griego

El Racing, con el que le queda un año, le deja ir gratis

Actualizado a
<b>NO CONTÓ. </b>Ni Mandiá ni Portugal le dieron minutos.
Nacho cubero

La falta de protagonismo en las últimas temporadas de Luis García tanto en el Atlético de Madrid como en el Racing no han logrado borrar el brillo de su currículum. Al menos, no del todo. En Grecia quedan clubes dispuestos a incorporarlo a sus filas. Si fue el Aris de Salónica el primero en interesarse por el futbolista de Badalona, y también han hablado con el Larissa, es el Panionios el que parece más cerca de poder cerrar la operación.

El representante del futbolista, Manuel García Quilón, lleva semanas negociando con intermediarios y dirigentes del club de Nueva Esmirna, un suburbio de Atenas, para intentar llegar a un acuerdo. El Racing, no supondrá un obstáculo ya que después de que Portugal, buen amigo de García Quilón, haya confirmado tanto al club como al agente que no cuenta con Luis García, están totalmente dispuestos a concederle gratis la carta de libertad.

Dos años o más. El equipo heleno está dispuesto a ofrecerle un contrato por una o dos temporadas (con el Racing le queda sólo una) pero Quilón ha empezado pidiendo tres años. Puede solucionarse. El problema puede venir en que la cantidad ofrecida por cada una de las temporadas es mucho más baja que la que tiene firmada en Santander, en torno al millón de euros.

Luis García acaba de cumplir 32 años, ha pasado, entre otros, por Barça, Liverpool y Atlético de Madrid y pese a su falta evidente de ritmo mantiene una calidad incuestionable con ambas piernas. Especialmente a balón parado.

El club de los griegos de Turquía

La historia del Panionios es única en el mundo. Un club nacido en un país se traslada, tras una guerra, a otro y sigue existiendo ochenta años más tarde. Fundado en Esmirna, hoy parte de Turquía, cuando pertenecía a Grecia, tras la guerra que acabó en 1922 con la victoria de las tropas de Kemal Ataturk y la expulsión de los griegos de Anatolia, el Panionios se vio obligado, también, a marcharse. Los refugiados fundaron Nueva Esmirna, hoy parte de Atenas, y allí renació de sus cenizas y sigue jugando el Panionios.