"Fue un honor y un regalo jugar aquí, estoy en casa"

Se acabó su historia de amarillo. ¿Cómo se siente?

Me siento extraño de saber que todo se ha acabado. Pero estoy feliz por cómo ha ido todo y poder despedirme de mi gente y de la afición.

¿Se marcha sin rencor?

Rencor ninguno, estoy en mi casa y el primero que ha sido consciente de que todo se podía acabar era yo. Esto es fútbol y el que no entienda que esto puede pasar, lo tiene mal.

¿Esperaba un año más?

Siempre quieres continuar, pero no era algo que me obsesionara. Es más fui yo el que hablé con el club antes de tiempo para saber qué idea tenían y no hacer la cosa muy larga.

¿Y qué le dijeron?

Lo que tocaba en ese momento, que no contaban conmigo y que por lo tanto era libre de buscar mi futuro en otro lado.

Así de claro...

Bueno, hablamos de todo y de la situación. Como siempre y desde que llegué a este club siempre han sido claros, tanto ellos como yo, y eso me gusta.

¿Y Garrido qué le dijo?

Pues que contaba con tres jugadores en mi puesto y que confiaba en mí, pero que tampoco podía olvidar mi edad y tenía que decidir. Y esa decisión fue la de apostar por los otros.

Es curioso, usted empezó con Garrido y se va con él...

Sí, es una coincidencia, pero nada más. A Juan Carlos no le guardo rencor, ni nada parecido. Es más, tenemos una gran relación y le estoy agradecido por su trato en todos estos años.

Y ahora que se marcha, ¿qué recuerdo se lleva?

Pues muchos buenos y muy bonitos. Para mí ha sido un honor y un regalo todo lo que he vivido en el Villarreal. Aquí he logrado lo que un jugador profesional desea y he formado parte de ello desde el principio.

Eso si que es verdad, lo ha vivido todo aquí...

Llegué justo en el momento de el gran salto del equipo y de su crecimiento y eso ha sido una gran experiencia.

¿Ha sido espectacular?

Fue y lo seguirá siendo, estoy convencido de que este proyecto no ha llegado a su máximo nivel y llegarán metas más altas.

¿Qué quiere decir?

Hay un gran equipo, una gran cantera y, sobre todo, un proyecto y unas ideas muy claras.

¿Y dónde se puede llegar?

Es difícil de saber, ya le he dicho al presidente que jugarán una final y ese día quiero estar con el equipo en la grada.

¿Y qué le han dicho?

Pues que si llegan a esa final, estaré allí con ellos.

Lo ve tan claro...

Sí, por el equipo y la plantilla que hay. Es un buen grupo y cuenta con grandes jugadores.

Pero parece que no van a llegar grandes figuras...

No creo que sean tan necesarias. Si mantienes el bloque y con los que vienen de abajo, tienes un gran equipo.

Vaya con el filial...

Es espectacular. Yo llegué así y creo que ése es el camino. Además, conozco a todos los futbolistas y el nivel que tienen es muy alto.

¿Su peor momento?

La semifinal de Champions con el Arsenal, no olvidaré cuando pitó el final el árbitro. Esa sensación de decepción y tristeza no se la deseo a nadie.

¿Por qué dicen que es el lateral más caro del Villarreal?

Es algo curioso que me decía siempre Llaneza, asegurando que les había costado mucho dinero por dejar en el banquillo a tantos jugadores. Es una satisfacción haber jugado y peleado por la titularidad.

¿Qué jugador es el que más le ha impactado?

Cazorla es el que más me impresiona. Lo que es capaz de hacer con el balón con ambas piernas y su nivel futbolístico no lo había visto nunca.

¿Y de Garrido qué me dice?

Es un gran entrenador, joven, ambicioso y preparado. Puede triunfar y está capacitado para lograr grandes cosas. Debe pulir algunas cosas, a veces es demasiado acelerado o tiene mucho ímpetu, pero tiene las cosas muy claras.

¿Y del presidente?

Es una persona diferente, muy especial. Alguien que ha logrado algo impensable con el Villarreal, eso no está al alcance de muchas personas. Es muy directo, tiene las cosas muy claras y, sobre todo, te las deja claras desde el principio. Sin duda, es clave en esta historia. Cuando llegan los nuevos siempre nos dicen que exageramos, pero con el tiempo son ellos los que lo valoran.

¿Y su hijo?

Sabe lo que lleva entre manos. Trabaja fuerte y con Llaneza forma un buen equipo.

¿Y de su futuro qué?

Hay cosas sin concretar.