"Raúl logró todo; no debe pensar en mi récord..."

¿Dónde vio el 'gol del cojo' de Raúl en Zaragoza?

En la televisión de mi casa de Almería. Fue un gol puro de delantero listo. Lesionado y todo, Raúl sabía que el gol estaba ahí. Esa casta y esa inteligencia en el área me recuerdan un poco a mí.

Lo que le hará menos gracia es que ya ha superado a Di Stéfano y está a sólo seis goles de usted, que se quedó por detrás del mítico Zarra.

Raúl no debe obsesionarse con superar mi récord porque ya lo ha ganado todo con el Madrid. Dependerá de lo que decida con su futuro.

¿Qué consejo le daría? Usted se fue del Madrid algo molesto pese a ser en su día un ídolo del Bernabéu.

La situación de Raúl es totalmente diferente a la que yo sufrí. Pellegrini es un señor y un caballero y me consta que habló con Raúl para explicarle el nuevo rol que iba a tener en el equipo. Sin embargo, Beenhakker me engañó, fue a su beneficio propio y me mintió descaradamente. La prueba es que me fui del Madrid y estuve seis años más en el fútbol profesional metiendo goles.

Si usted fuera Raúl, ¿qué decisión tomaría?

Yo le sugiero como colega y con mi experiencia que el año próximo esté donde sepa que se sentirá más a gusto y más ilusionado. Raúl necesita una motivación extra a la que ya tiene ahora.

O sea, que se vaya...

No he dicho eso. Lo que aclaro es que Raúl es un ganador nato y valoro lo personal por encima de lo profesional. Todo depende de si Raúl acepta quedarse y jugar poco desde ahora o prefiere tomar otra experiencia y sentirse importante de nuevo para demostrar su jerarquía y su valía.

Pero el que se va del Madrid es como si se lo tragase la tierra. ¿Cómo fue su caso?

Fui al América de México, donde metí once goles. Luego fiché por el Rayo Vallecano y añadí otros dieciséis, lo que me permitió llegar a esos 234 que me mantienen por delante de Raúl. No me arrepiento de la decisión que tomé, porque con Beenhakker era imposible que yo siguiera allí. Pero es verdad que al Madrid siempre se le echa de menos.

Beenhakker le dejó fuera de una convocatoria ante el Espanyol y usted dijo textualmente: "Me está inflamando las amígdalas".

Ni me lo recuerde. Fue un pasaje bastante feo. Prefiero hablar sólo de Raúl.

Pues diga.

Raúl no debe apresurarse en su decisión final. Que no escuche a nadie fuera de su familia. Él se cuida al cien por cien como hacía yo, pero ha hecho tantos kilómetros que eso pasa factura. Raúl lo ha sido todo en el Madrid. No tiene nada que demostrar ya...