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Almería 1 - Real Madrid 2 | LA CONTRACRÓNICA

¡Clavo Ardiendo a tope!

Los azotes de Diarra a Van der Vaart tras el gol salvador del holandés son el reflejo del espíritu rebelde de este Madrid que se niega a rendirse. En Almería, el Barça no pasó del empate (2-2). El Madrid sí ganó y obligó a Alves a hacer 13 paradas.

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<b>¡GOLAZO DE CRISTIANO! </b>El portugués firmó su gol número 19 en esta Liga que no piensa regalar al Barça. Su jugada fue digna de un crack. ¡Ni Alves pudo pararla!

Hay vida, hay Liga. Estoy orgulloso de este Madrid. Ya sé que no juega como quisiera el personal, que la comparación continua con el Barça hace pupa y que no es el equipo galáctico que llenaba el Bernabéu en las presentaciones veraniegas. Pero ha recuperado el espíritu del Madrid de siempre. Como bien dijo Valdano en AS tras el Clásico: "El Madrid nunca se rinde". Me consta que a algunos jugadores les sentó a cuerno quemado la celebración precipitada de sus colegas del Barça el sábado en el mismo césped de Chamartín. Botaban como si ya hubieran ganando el título. Eso ha enrabietado a la bestia, que se ha propuesto llegar a los 98 puntos y estoy seguro de que lo conseguirá. Almería y el laberinto táctico del profe Lillo construían un dique difícil de derribar, y más con ese Alvesman que ganó anoche el casting de OT para ser el suplente de Casillas la próxima temporada. Pero el Madrid sabe, como el Liverpool, que nunca caminará solo. La afición muere por ver esa película llamada 'Alirón en Cibeles'. Me da igual que el Barça juegue mejor. Esto es una batalla de orgullo. Y ahí el Madrid siempre fue superior. Pese a quién pese...

¿Mediterráneo gafe?Así era hasta la fecha. Pero Pellegrini ha conseguido, con esa flema chilena que lo convierte en un tipo inalterable, contagiar a sus pupilos para que derriben los presuntos gafes que estaban instalados en Riazor (1-3), Coliséum de Getafe (2-4) y anoche el coqueto estadio almeriense (1-2). Este Madrid tiene algunas espinillas molestas en la cara (juego previsible, sin bandas y falto de luz en la conducción), pero tiene un carácter que logrará, como el otro día me decía Juande Ramos, que no se repita la debacle de hace un año tras el 2-6. Este Madrid morirá, si es que muere, de pie. Lo exige su historia y la valiente Cofradía del Clavo Ardiendo, que está que arde. No me pregunten a qué viene esta fe irracional en lo teóricamente imposible. Sucedió hace tres años con Capello y puede repetirse ahora. El Bernabéu sabe que existe algo sobrenatural que arropa a este escudo con el que no podrá nadie. Ni treinta Messis ni cincuenta Xavis... Me he venido arriba gracias a ese Cristiano que parece Braveheart luchando contra los ingleses (su golazo dará la vuelta a Europa) y a ese Rafael VDV que se nota que es de Chiclana. Alegría, alegría...

Almería vikinga.El Almería de Lillo sufrió su primera derrota en casa desde el 29 de noviembre, pero las gradas no lloraron del todo. Allí estaban mis amigos de Los Gallardos (a los que hoy veré en una charla-coloquio que promete) y de Albox (Nino Capel, ¡presidente!). Allí son de corazón blanco y creen en el milagro. Igual que los colegas de Villalbilla (Chero, ¡adelante!), El Día de la 7ª de Baza, Bus-Stop de Salamanca y La Ribera de Aranda de Duero. El madridismo no se rinde. Cibeles, tranquila, que esto es muy largo...