Emery recupera soldados para la batalla europea y la afición también se suma

El Valencia tiene mañana una 'final' europea y no se la quiere perder nadie, ni sobre el césped, ni en la grada. Unai recupera varias de sus herramientas más valiosas, principalmente en el apartado defensivo y creativo; mientras el valencianismo está dando en las últimas horas una nueva muestra de su categoría, volcándose otra vez, como ante el Brujas, para empujar a los de Emery en la Europa League.

Si en el último choque ante el Racing, el Valencia encontró en las numerosas bajas un argumento para justificar su paupérrimo juego, mañana no podrán encontrar en la ausencia de futbolistas una excusa, pues en el once que presente Emery ante el Werder Bremen habrá hasta cinco caras nuevas con respecto al choque frente al Racing: los sancionados en Liga César, Miguel, Marchena y Banega, además de la vuelta a la titularidad de Joaquín, quien sólo tuvo 19 minutos en la segunda parte del lunes.

Pese a la buena actuación cuajada por Moyá ante el Racing, todo apunta a que César mantendrá la titularidad en la Europa League que arrebató al mallorquín ante el Brujas, pues en el cuerpo técnico se considera que se dio un paso muy importante con el cambio de portero en este choque, al mismo tiempo que la confianza en Moyá se ha incrementado tras el partido ante el Racing.

En la zaga, Unai recupera a Miguel, para formar junto a Navarro, Dealbert y Alexis, pues Bruno no llegará a tiempo y, ahora mismo, es duda para jugar ante el Barça, ya que sigue arrastrando molestias en su tobillo derecho, del que no acaba de estar listo tras haber forzado para acortar plazos de recuperación.

La manija del equipo cambiará radicalmente de dueños. Albelda todavía no está recuperado (volverá al once el domingo en Barcelona), pero su puesto será ocupado por Marchena, quien guardará las espaldas de otro que vuelve con Europa: Banega. Como también le ocurre a Joaquín, quien se unirá al Tridente de ataque (Mata, Silva y Villa) como referencia ofensiva.

El 'grito' de Mestalla.

Las inmediaciones del coliseo ché presentaron ayer el mismo aspecto que hace dos semanas, en la víspera del trascendental choque ante el Brujas. En torno a las taquillas de Mestalla y en todos los puntos de venta oficiales se registraron largas colas de aficionados que están respondiendo a la llamada del club, que ha puesto en marcha la campaña 'Únete al grito de Mestalla', con la que se pretende incentivar a la afición para repetir el ambiente vivido en la última eliminatoria.

Para esto, se ha decidido regalar una entrada a los abonados que hayan hecho su reserva para el nuevo estadio y obsequiar también con dos localidades a aquellos que hagan una compra superior a 50 euros en una tienda oficial ché. Así, la afluencia masiva de valencianistas hizo que ayer ya fueran 31.000 las localidades retiradas para el choque de mañana, 11.000 de las cuales se adjudicaron en un día.