Internacional | Inglaterra
El Portsmouth se declarará en suspensión de pagos para afrontar su deuda
El Portsmouth de la liga inglesa se declarará en suspensión de pagos este viernes, ante la imposibilidad de encontrar compradores que puedan hacer frente a la enorme deuda que acumula esta entidad de más de cien años de antigüedad.
El Portsmouth de la liga inglesa se declarará en suspensión de pagos este viernes, ante la imposibilidad de encontrar compradores que puedan hacer frente a la enorme deuda que acumula esta entidad de más de cien años de antigüedad.
Al "Pompey", último clasificado de la Premier, se le restará, además, nueve puntos, lo que prácticamente le condena a descender de la máxima categoría del fútbol inglés al final de la temporada.
El dueño del club, Balram Chainrai, y el resto de los accionistas mayoritarios del Portsmouth, ha intentado en los últimos días negociar en Londres con varios grupos de inversores la venta de la entidad, cuya deuda asciende a unos 107 millones de euros.
Ante el fracaso de esos esfuerzos, Chainrai, el cuarto dueño del club en menos de un año, ha optado por la liquidación de este histórico del fútbol de las isla.
Un portavoz de la entidad explicó en la web del "Pompey" que las posibilidades de que en los próximos días llegue una "oferta de compra creíble" son remotas.
"La suspensión de pagos significa que el club volverá a emerger como una entidad saludable. El club podrá así volver a resultar atractivo para compradores potenciales", añadió el portavoz.
El pasado lunes, el empresario de los Emiratos Árabes Unidos Sulaiman al-Fahim abandonó su puesto de presidente no ejecutivo del Portsmouth, vendiendo al mismo tiempo el 10 por ciento de sus acciones a los hinchas.
Además de las dificultades para encontrar compradores, el Gobierno británico ha presionado al club para que haga frente a su enorme deuda porque ha incurrido en el impago de impuestos.
El Portsmouth había solicitado también a la Premier League permiso para vender varios de sus jugadores fuera de la temporada de traspasos para ayudar a liquidar la deuda, solicitud que, no obstante, fue rechazada.