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Pepe Díaz

"Si estamos bien, nadie se nos resiste en casa"

El estadio El Arcángel acogerá mañana un duelo de pistoleros. Pepe Díaz lleva siete goles y Stuani suma diez con el Albacete. Pero el reto del Córdoba es otro: ganar y seguir invicto en casa. Un final feliz a 2009.

Actualizado a
Pepe Díaz.
j. obrero

Menudo duelo de artilleros el que se presenta para mañana con Stuani...

La verdad es que no se me pasa mucho por la cabeza. Mi duelo es con la defensa y con el portero del Albacete. Bastante tengo con eso como para pensar en un delantero del rival.

No están saliendo las cosas mal para su Córdoba y para usted este año

No nos podemos quejar, pero no tenemos aún tranquilidad porque aún no hemos hecho nada. Hay que seguir trabajando muy duro porque sabemos cómo es esta categoría. Llevamos muchos empates seguidos en la Liga y queremos ganar mañana para irnos más tranquilos de vacaciones y estar más cerca del objetivo.

¿No temen al potencial del Albacete, sobre todo en la línea de arriba?

Por aquí han pasado esta temporada grandes equipos y hemos conseguido que no se escapen muchos puntos. Queremos ganar porque no nos planteamos nada del rival. Sabemos cuáles son nuestras armas y cuando las utilizamos bien no hay rival que se nos resista. El Arcángel es un fortín y debemos seguir así esta temporada porque sabemos cómo están las cosas de caras fuera de casa.

Llevan siete partidos sin perder y en casa ningún rival ha logrado los tres puntos

Sí, pero lo más importante es que llevamos cuatro empates seguidos. Si hubiéramos ganado dos y perdido otros dos, tendríamos dos puntos más. No me interesa tanto no perder, sino ganar lo máximo posible. Hay que centrarse en este partido y ganar. Hay que sumar de tres en tres.

Tendrá ganas de marcar ya otro gol, ¿no?

Siempre tengo ganas. Llevo tiempo sin hacerlo y el día del Levante incluso fallé un penalti y me anularon un gol legal. Tengo ese resquemor por dentro que me está quemando. Espero hacerlo mañana, que el equipo gane y dedicárselo a mi mujer, que está embarazada de nuestro primer hijo.