La victoria se basó en el mayor acierto en el remate ante un equipo como el aragonés que no fue capaz de sacar fruto de algunas de sus buenas acciones, especialmente en el segundo período, donde dominó durante una buena fase del mismo.

Los primeros minutos fueron igualados y sin que ninguno de los dos equipos llegaran a imponerse. La primera oportunidad la tuvieron los oscenses, en el minuto 12, tras una hilvanada acción que Camacho culminó de un duro disparo al que respondió el meta Guaita con una buena intervención.

Poco a poco, el juego se estabilizó en la parcela ancha, sin que ni andaluces ni aragoneses llegasen con peligro al portal rival, por cuantos los errores se sucedieron y el juego careció de fluidez, lo que incluso provocó que los espectadores protestasen por la falta de espectáculo.

Todo cambió en el minuto 41 cuando, a la salida del segundo saque de esquina favorable a los recreativistas, el argentino Jerónimo Barrales, libre de marca, cabeceó a las redes. Un grave error defensivo del Huesca propició que el Recreativo se pusiese por delante en el marcador.

La segunda parte comenzó con los mismos síntomas, aunque los aragoneses tuvieron una clara oportunidad de empatar en el minuto 52, cuando Rubiato dejó completamente sólo a Víctor Pérez ante Guaita y el remate fue rechazado, en buena intervención, por el portero del Recreativo, quien poco después volvió a lucirse al desviar un disparo raso de Rubiato.

Aunque los oscenses abrieron sus líneas y empezaron a crear más peligro en las cercanías de Guaita, en un contragolpe llegó el segundo tanto onubense. Fue en el minuto 71, en un preciso centro de Aitor que Pablo Sánchez, que prácticamente acababa de entrar en el terreno, cabeceó junto al poste izquierdo.

Los oscenses, con el marcador en contra, mantuvieron la búsqueda del portal onubense, pero no estuvieron tampoco afortunados a la hora de rematar. En el minuto 83 Juanma desperdició una buena oportunidad al rematar junto al poste izquierdo el que pudo ser el 2-1.

El Recreativo, por su parte, supo guardar su parcela para defender la ventaja en el marcador y buscar, a través del contragolpe, aumentar la cuenta, pero la precipitación en los remates hicieron que el marcador no se moviese más.