Cruzeiro toma ventaja con el 0-0 en La Plata

Estudiantes había ganado los siete partidos jugados hasta el momento en el estadio Ciudad del Plata en la Santander Libertadores y fue a pinchar en el más importante de todos: la ida de la final ante Cruzeiro. Terminó 0-0 y la semana que viene bajará a Belo Horizonte con la final un poco cuesta arriba.

Comenzó a rodar el balón y se dejó de pensar en la Gripe A pese a que en la grada se vieran unas cuantas mascarillas. Y pasó a hablarse de Fabio, el portero del Cruzeiro. Esta vez por su buena actuación y no por sus excentricidades, como la de jugar siempre en manga corta aunque haga tanto frío como hacía en Buenos Aires o la de usar un protector bucal azul, como si de un boxeador se tratara. El portero se bastó para desarmar la táctica del Estudiantes (arrollar en La Plata y defender el resultado fuera): hizo un paradón a Verón nada más comenzar, repitió con un chut de Enzo Pérez, y al filo del descanso volvió a atajar otro remate de La Brujita. En la segunda mitad culminó su gran actuación con una doble parada que terminó de desesperar a los pincharratas.

Espoleado por el portero, el Cruzeiro fue creciendo poco a poco tras el arreón inicial de Estudiantes. Y cuando, mediada la segunda parte, fallaron las fuerzas, defendieron a base de faltas. La más espectacular, un codazo de Ramires a Verón que no mereció la amarilla pese a que le abrió una brecha en el pómulo. Estudiantes se desinfló y Cruzeiro tuvo sus ocasiones: Kléber tiró fuera un balón cuando estaba a puerta vacía, perdonando la vida a Estudiantes.