Inchaurraga, en el ojo del huracán

El Athletic es un volcán. Con la directiva inmersa en un proceso de reflexión sobre la idoneidad de mantener al frente de Lezama a los actuales responsables de la factoría rojiblanca después de la dimisión de Koldo Asua (uno de los pilares del proyecto) por marcadas divergencias con la forma de hacer de sus superiores, el club no para de recibir varapalos. El último lleva la firma de Joseba Inchaurraga, vicepresidente con tarea directa en el organigrama deportivo. El directivo ha entrado en una ciega defensa del status actual y ha puesto en compromiso a sus compañeros de junta, que se han marcado un plazo de reflexión hasta el próximo miércoles para tratar de reconducir el futuro de la cantera rojiblanca.

Inchaurraga ha dado un paso adelante y no se ha quedado callado. Pero ha quedado en una delicada situación porque en la junta no ven bien que haga públicas sus reflexiones cuando el grupo de gobierno se ha marcado un periodo de análisis antes de tomar decisiones. La idea de Inchaurraga no es otra que mantener en sus respectivos cargos a Luis Solar y Julen Masach, mientras que otra parte del grupo aboga por cambiar la cúpula de Lezama. El vicepresidente está entre la espada y la pared porque acabar con las cabezas visibles de Lezama supondría un golpe durísimo a su gestión. Y está dispuesto a defenderlo con uñas y dientes. La pega es que entrar de lleno en la polémica le ha convertido en un implicado más y ahora se encuentra en el ojo del huracán. En la junta le pedirán explicaciones. Y si se decide acabar con el binomino Solar-Masach quizá incluso le inviten a marcharse con ellos. Ayer, de momento, apuntó en ETB que no tiene intención de dimitir.

Inoportuno. Inchaurraga fue el elegido por la junta para recoger el jueves el 'Perretxiko de Plata' con el que el Ayuntamiento de Orduña ha galardonado al Athletic. Allí, lejos de apaciguar la tempestad, azuzó el fuego con declaraciones que dejan en mal lugar a la institución porque cargó contra Osasuna: «Somos un referente en Euskadi y que hubiese bajado nos habría permitido trabajar con mayor facilidad en la cantera, aunque los derbis siempre son bonitos». Sus posicionamientos han dado de que hablar en Ibaigane.