El club se aprieta el cinturón

El Villarreal trabaja desde hace tiempo para adaptarse a la crisis en la que se encuentra el país y por ende el fútbol. Una crisis que, desde el club, se veía venir y, por lo tanto, ya se trabajaba por tener soluciones para la misma. Y, por ello, la más destacada y que se está llevando a cabo es la reducción del presupuesto. Una reducción que sería mínimo de un 15% respecto al de la campaña anterior. De esta forma, el Villarreal se ve obligado a bajar de los 85 millones de euros a, como mínimo, 75 millones, que es la cantidad a la que quiere llegar la directiva.

Ésta sería la primera vez desde la llegada de Fernando Roig al club en la que se reduciría el presupuesto en vez de aumentarlo. Así, se acabaría con lo que se había convertido en un crecimiento sostenido de 12 años de manera consecutiva, ya que, desde el primer presupuesto de la campaña 96-97, que era de tres millones de euros (500 millones de pesetas de las de antes), el presupuesto ha ido siempre aumentando. Un incremento que llegó casi a multiplicar por 30 el presupuesto de esa primera campaña y será 25 veces superior en esta próxima.

Una reducción a la que se espera llegar gracias a la llegada de jóvenes valores que ya pertenecen al club, lo que reduciría el gasto en incorporaciones. Aunque otra vía importante sería la reducción del gasto en fichajes, ya que desde el mismo club se asegura que el gasto no puede ser tan elevado como en otras adquisiciones anteriores. Buena prueba de ello es, por ejemplo, el caso de Tiago Silva, futbolista por el que pujó pero no pudo alcanzar las cantidades que se manejaban.