Descanso y limpieza de tarjetas, objetivos del campeón irunés

Sensaciones opuestas en el duelo guipuzcoano de la jornada, ya que se presenta como una última oportunidad para el filial donostiarra en su pugna por escapar de la zona de descenso a Tercera, mientras el Real Unión de Irún ya lo juega con la calma del campeón, sólo pendiente de dosificar minutos entre los jugadores más castigados, y forzar tarjetas para que los titulares habituales lleguen 'limpios' a la primera eliminatoria de ascenso entre los campeones de grupo.

Los locales no vencen en su feudo desde el pasado quince de febrero, cuando ganaron por la mínima al Marino de Luanco. Idiakez espera que la relajación del Real Unión le convierta en adversario más asequible, aun a sabiendas del potencial fronterizo. Sarasola es baja en la defensa blanquiazul por cinco amarillas. El equipo filial de la Real no ha marcado ningún gol en sus tres últimos encuentros, una rémora durante toda la campaña que le ha situado en las posiciones de descenso.

Por su parte, el Real Unión de Irún llega con la conocida baja de Juan Domínguez por cinco amarillas. Ya el domingo pasado el equipo forzó algunas cartulinas amarillas -vio siete ante el Bilbao Athletic- en el plan de 'limpiar' de amonestaciones a los teóricos titulares. Iñaki Alonso puede introducir alguna rotación para dar descanso a los jugadores más cargados de minutos. El Real Unión ha ganado en nueve ocasiones en el campo del filial donostiarra.