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Liga BBVA | Valencia

Los tres planes de Fernando

Pese a que el futuro económico de la entidad es incierto, el vicepresidente tiene claro cómo puede ser el Valencia del futuro. Antes, el Consejero Delegado deberá comunicarle cuánto se puede gastar en fichas. Desde Negredo a jugadores del filial, todo es posible... -Chimo Masmano

Chimo Masmano
Negredo es uno de los objetivos del Valencia.

Negredo sería la piedra angular del proyecto en el que más dinero se podría gastar el club en fichas

La mayor alegría que se podría llevar el vicepresidente deportivo ché es que Javier Gómez le diga que puede confeccionar una plantilla con un coste de 60 millones, pues esta cifra es una de las más altas que contempla el plan de viabilidad trazado por el Consejero Delegado de cara a la próxima campaña. De esta manera, si Fernando lograra aligerar la actual nómina de jugadores, obteniendo un alto beneficio (en este apartado se contempla las venta de Villa y Silva o, al menos, uno de los dos), podría intentar el fichaje que más le ilusiona : Álvaro Negredo.

Como ya les contó AS, Fernando pretende que el delantero se convierta en la piedra angular de su proyecto. El excelente rendimiento que está ofreciendo en el Almería las dos últimas temporadas (la pasada a las órdenes de Emery, quien también apuesta fuerte por él) ha hecho subir su precio, como mínimo, a los 15 millones de euros. Además, el Real Madrid podría ejercer una opción de compra por algo más de cinco millones.

También podría reforzar es el lateral derecho, con dos de los hombres que encantan a Fernando: Azpilicueta y Jesús Gámez, cuyos precios rondan o superan los seis millones.

Pedro León es uno de los hombres que encaja en un Valencia de precio de nóminas de 'tipo medio'

La segunda posibilidad que entra en los planes de Fernando para conformar una plantilla contempla que ésta tenga como coste máximo 40 millones de euros. Este escenario parece se acerca más a las posibilidades que podría presentársele al vicepresidente deportivo si la situación económica actual no varía y se mantiene así hasta el mercado de fichajes de verano.

Pese a que el volumen de gasto en fichajes será bajo, Fernando podría hacer algunas incorporaciones de jugadores que se han destapado como revelación esta temporada y que podrían ser fichados por una cuantía razonable, teniendo en cuenta la situación económica de la entidad valencianista.

En este punto aparece Pedro León, jugador del Valladolid, cuyo precio de venta ronda los cinco millones. A Fernando le atrae la idea de incorporar al jugador de Mula, además de por la calidad que está demostrando este año, por su juventud y su polivalencia en el centro del campo. Su compañero de banda, el lateral Pedro López podría volver al Valencia previo pago de dos millones de euros. Y otro de los que encaja en este perfil es el malaguista Apoño, por el que el Valencia ya le ha preguntado a su representante.

Jóvenes valores del fútbol sudamericano como el brasileño Walter, jugadores cedidos, libres y del filial

El tercer plan es el más 'económico' para el Valencia y el que más quebraderos de cabeza traerá, seguro, a Fernando para hacer realidad sus intenciones, ya que debería trabajar sobre un máximo de coste de plantilla de 30 millones de euros. El vicepresidente tiene claro que si recibe esta 'orden' de Javier Gómez deberá basar su proyecto en jugadores cedidos o que terminen contrato con sus respectivos equipos. Además, aunque esta posibilidad ya la contempla en sus otros dos tipos de plantilla, los jugadores del filial tendrían un mayor protagonismo. Fernando quiere que hombres como Ximo Forner, Carlos David y Olcina estén en la primera plantilla. Y una idea que también maneja para cualquiera de los tres escenarios, pero fundamentalmente para éste, es el de 'pescar' en el fútbol sudamericano. Un ejemplo de esto es uno de las promesas del fútbol brasileño que gustan a Fernando: el joven delantero del Internacional de Porto Alegre Walter da Silva. El handicap que tiene el Valencia respecto a otros clubes que pujen por este u otros futbolistas es la falta de liquidez para hacer una incorporación inmediata y, de esta forma que no se encarezca como ocurrió con Keirrison.