La Unión Deportiva Las Palmas derrotó al Deportivo Alavés y retomó la senda del triunfo diez jornadas después, gracias a dos goles del delantero sevillano, Marcos Márquez, quien, de paso, acalló las voces que concedían en este flojo partido un ultimátum a su técnico, Javier Vidales.

La calidad no resultó el signo más destacado durante un primer tiempo de elevada pugna y en el que el dominio territorial lo ejerció el conjunto grancanario. Marcos Márquez adelantó a su equipo al aprovechar un mal entendimiento de defensa y portero rivales y, algo más tarde, igualó Moreno en un despiste de marcaje de David García.

Con el empate a uno en el marcador, Nauzet, tras un saque en corto de falta de Miguel García, ensayó desde lejos y obligó a Bernardo a realizar una estupenda parada -minuto 27-; y David García, dos después, tiró desde la frontal del área grande y permitió que el guardameta foráneo reiterara su buena colocación.

Empujó más la Unión Deportiva y a su rival no le quedó otra que defender, algo que intensificó a raíz de la expulsión de Juanjo. Después del descanso, se apreció que el equipo vasco salió a por todas, incluso, pronto estrelló el balón en la madera, mediante un remate cercano de Garitano.

En cualquier caso, el equipo amarillo reaccionó, empujó a su adversario hacia su parcela y dispuso de oportunidad en disparo lejano y centrado de Dani López, que neutralizó perfectamente Bernardo minuto 60-.

A renglón seguido entre Jorge, Pablo Sánchez y Marcos Márquez llevaron una acción combinada hasta el área oponente, que término éste con un tiro cercano y suave (2-1). Se dedicaron a amarrar los puntos los jugadores isleños en la última fase, mientras que sus contrarios desfallecieron en un intento vano por empatar.