El Madrid barrió a un Atleti que ya es colista

Un triunfo siempre es más dulce si complica el futuro al vecino. El Madrid se impuso en el derbi y hunde a un Atlético que aún no ha puntuado y se coloca como colista. Sin embargo, los blancos tuvieron que emplearse a fondo en los primeros compases del encuentro ya que el teórico rival desvalido salió dispuesto a dar guerra.

Ambos porteros se convirtieron en los protagonistas del tramo inicial. Buyo paró dos disparos a Moya, mientras Diego atajó las ocasiones de Ramis. Tal era la igualdad que la alegría sólo le duró 20 segundos al Atleti: tras el gol de Vizcaíno (7') Ramis empató. Los locales creyeron en la victoria, pero no contaban con que el capitán madridista quería ser de nuevo el protagonista en un derbi. Buyo frenó todos los disparos a bocajarro y las faltas de Pantic, algo que dio oxígeno a los blancos. Velasco vio, llegó y marcó en su debut, adelantando a un Madrid que ya no cedería terreno en el marcador, pese a que Sequeiros aprovechó un error de la defensa merengue. Mena encontró en la espalda de Alfonso a su gran aliada y gracias a ese tanto de falta recortaron distancias al descanso (3-4).

Pero Karanka, el único superviviente de la última derrota madridista en un derbi (en la temporada 99-00) se sacó la espina con dos goles y una pizca de suerte, pues en ambos casos pegó en un jugador rival. El Madrid logró su máxima diferencia con el 4-11, aunque quedaba una asignatura pendiente: que el pichichi blanco Iván Pérez marcara su gol. Con éste se logró que todos los jugadores blancos anotaran en el partido. Pantic maquilló el marcador, pero el Madrid ya sólo piensa en dar caza al Barcelona.