El Leganés se contagia del espíritu de Anfield

Esto es Butarque. This is Butarque. Dast is Butarque. Así, bajo estas palabras, como si de una evocación multilingüe de Anfield se tratase, saltan los jugadores del Leganés al terreno de juego cada partido que disputan en casa. Llamamiento a convertir el estadio pepinero en un fortín que está dando resultados.

Desde que los de David Gordo perdieran ante el Mérida el 21 de noviembre del pasado año sólo han acumulado victorias. Cinco triunfos con un porcentaje goleador aplastante: 13 tantos a favor, 2 en contra. "Para nosotros es fundamental que todos los duelos que juguemos ante nuestra gente sumen de tres en tres puntos y que, además, lo logremos con autoridad. Eso nos dará confianza y hará que el rival venga atemorizado y con mucho respeto. Que también ellos piensen que esto es Butarque y que sufrirán para sacar algo positivo", relata el técnico.

Un espíritu numantino reflejado en los múltiples carteles con los que el equipo pepinero ha decidido forrar el túnel de vestuarios por el que acceden al césped blanquiazul. "Tras perder precisamente contra el Mérida pensé que podría ser positivo arengar al equipo y motivarlo para que sintieran lo que realmente significa ser del Lega: algo más que un sentimiento", explica, emocionado, el ideólogo de esta iniciativa, Luís Ángel Duque.

El director deportivo pepinero ha sido el autor de todas estas proclamas, frases cómo "El dolor es temporal, el orgullo es para siempre" o "Un día es hoy y alguien soy yo. A por ellos". Lemas en forma de acicate que los jugadores apoyan. "Funciona. Cuando saltas al terreno de juego, ya de por sí lo haces excitado. Este método nos mete más en el partido y nos envalentona. Al pisar el césped lo sientes. Sabes que sí, que esto es Butarque".