COPA DEL REY | BARCELONA 2 - MALLORCA 0
El Barça aparca la excelencia y tira de oficio ante el Mallorca
El equipo de Guardiola da un paso de gigante para entrar en la final de la Copa del Rey al vencer por 2-0 al Mallorca. Bojan cuajó una gran primera parte y puso el primer gol en la cabeza de Henry. Con Messi ya en el campo, Márquez hizo el segundo transformando un magnífico lanzamiento de falta.
Con 'Messidependencia' o no, lo cierto es que el Barça gana con el argentino fuera del campo y arrasa cuando 'La Pulga' está presente. Hoy, con 1-0, saltó Leo, el equipo recobró su ritmo y los culés dejaron prácticamente cerrada la eliminatoria, aunque en la Copa todo es posble.
Los de 'Pep' se han acostumbrado a devastar a sus rivales. No distinguen, exterminan a quien se le pone por delante y cuando ganan dos cero parece que lo hacen sin esfuerzo, pero la realidad es que, partido a partido, el Barça se está allanando su camino hacia el soñado triplete. La Liga la tiene hecha a no ser que se produzca una catástrofe más que un milagro; está a un paso de la final de la Copa y el Olympique de Lyon tiembla esperando los cuartos de final de la Champions.
La dinámica del equipo le hace ganar por inercia sea quien sea el que ocupe la portería, el lateral izquierdo, las bandas o la delantera. Con Pinto, Sylvinho, Hleb, Gudjohnsen o Bojan en el once, su fútbol quizás no es tan prodigioso como el que practican los titulares, pero es mejor que el de la mayoría de los equipos de Primera División. Sin especificar, para no herir.
Es cierto que hoy se enfrentaba al colista de la Liga, el Mallorca, que además estaba mermado por las bajas (Ramis, Arango, Varela o Callejón). Pero, desde el primer minuto ya se sabía qué equipo sería el vencedor.
Ante la inicial ausencia de Messi y Eto'o, Bojan Krkic, adquirió protagonismo en el partido. El joven delantero, convertido por Guardiola en 'jugador Copa', intentó reivindicarse en los primeros minutos de juego con una gran jugada personal dentro del área. Bojan se deshizo de Juanmi con un movimiento de cadera, recortó a Nunes, que se pasó de frenada, y disparó raso ante Lux. El argentino como si fuera un portero de fútbol sala salvó el primero.
Krkic es uno de esos jugadores que es capaz de convertir un defecto en virtud. Su inteligencia y movilidad palian su falta de corpulencia y como los Iniesta o Silva, aprovecha su agilidad y soltura para aumentar su peligrosidad. Lo demostró minutos después de la primera ocasión. Iniesta encontró un pasadizo oculto en la zaga mallorquina y se metió hasta la frontal. Recortó, se paró, se tomó un refresco y después habilitó a Henry. El francés para Hleb y éste para Bojan en el área. El control orientado del canterano le permitió encarar a Lux, que de nuevo rechazó el disparo.
Y aunque el Barça había dado alguna muestra de flaqueza en los pies de Márquez y, sobre todo, de Touré Yaya, pasó lo que tenía que pasar. Bojan, otra vez Bojan, cayó esta vez a la banda derecha, se dio la vuelta, levantó la vista y se la puso en la cabeza al 'padre de los canteranos', Thierry Henry, que envió la pelota a la red. 14 goles esta temporada.
Guardiola buscó sentenciar y recurrió a Messi
Empezó la segunda parte, y a pesar del 1-0, Guardiola se apresuró a dar a entrada a Messi. Junto a él salió Busquets. Henry y Gudjhonsen, que cumplía su partido 100 con el Barcelona, al banco.
Bojan perdió teórica importancia dentro del campo, pero en la práctica volvió a desestabilizar a la zaga visitante. Lux, la pesadilla del culé, repelió un nuevo disparo de Krkic, que no se desesperó y siguió en su empeño, aunque algo más desafortunado.
La salida de Messi despertó el ingenio de Andrés Iniesta (hoy capitán), que aunque ya había dejado un par de jugadas para el recuerdo, comenzó a deleitarse con la pelota en los pies. Hoy más centrado en su posición táctica, distribuyó, movió, penetró, asistió y a punto estuvo de marcar. Al igual que el propio argentino, que hizo una de las suyas por la banda derecha y después otra por el centro, pero Lux volvió a salvar a su equipo, que se conformaba con el resultado.
Martí y Jurado dieron algo de vida a un tímido Mallorca, que no quería salir de casa para que no le quitaran los muebles. Pero entró Máquez y se los robó en apenas un instante. El que tardó el balón en entrar por la escuadra del meta mallorquín tras un lanzamiento de falta perfecto del mexicano.
Bojan se llevó la ovación del Camp Nou cuando fue sustituido por Eto'o. Estaba claro que Guardiola buscaba sellar la eliminatoria en la ida, pero no encontró el 3-0 pese al intento de sus jugadores. De hecho si Muñiz Fernández hubiera señalado un posible penalti de Márquez sobre Trejo en el descuento, quizás la crónica y las sensaciones hubieran sido otras.