Real Madrid 1 - Deportivo 0 | La contracrónica
Robben es de oro
Mi 'hermano' Nino, presidente de mi peña de Albox (Almería), enterró ayer a su padre y sólo pedía un deseo: "Que gane el Madrid en su memoria". A falta de buen juego, el equipo de sus amores cumplió. Pero el Bernabéu sigue aburrido...
Efecto Boluda. Antes de profundizar en los aplastantes balances estadísticos de mi paisano Juande Ramos (Pleno al 15, cinco triunfos consecutivos, nueve goles a favor, sólo uno en contra), debo referirme al excitante efecto Boluda. Me explico. Desde que Ramón Calderón dimitiera y el naviero valenciano se convirtiese en 'presidente por accidente', el Madrid se ha convertido en un club asociado exclusivamente con la victoria. El primer equipo (3-1 a Osasuna y 1-0 al Deportivo), el Castilla (2-1 al Sangonera, 2-0 al Vecindario y 2-0 al Alfaro) y el equipo de baloncesto (triunfos sobre Unicaja, Granada y Bruesa) sólo dan alegrías al mandatario interino con fecha de caducidad, aunque la afición espera ansiosa que sea definitiva (¿mayo, junio, julio...?). Sólo este club puede mantener esa firmeza en sus resultados a pesar de estar sumido en una quiebra institucional que mantiene al clavo ardiendo en prudente retaguardia...
Nuestro Messi. Me niego a comparar una joya del Madrid con un diamante del Barça. Pero lo que afirmo con rotundidad es que si Robben tuviese más fortuna en la última decisión (pase o remate) y en su delicada estructura muscular, ahora mismo estaría disputando con Messi el Balón de Oro del año 2009. El holandés celebró su 25 cumpleaños (es un crío, aquí vino Zidane con 29 y nos deleitó durante cinco cursos) con una exhibición de eslalons prodigiosos, regates desatados como si fuesen una explosión molecular y galopadas volcánicas estilo Bolt. Robben es la espada de Excalibur que el madridismo blandirá en la caza del Barça (ahí estamos, nadie se rinde) y ante el Liverpool. En Anfield le conocen. Y le temen...
Villarato. Me juego la televisión de plasma nueva de casa (mi mujer me mata como lo lea) a que Pérez Lasa no va a esa nevera donde ya engulleron bocadillos y refrescos en su día Tristante Oliva, Daudén Ibáñez y Pérez Burrull. Un golazo de cabeza por la escuadra se anula porque esto es el Camp Nou y te callas que el Barça tiene que ganar la Liga en marzo para centrarse en la Champions. Pues díganlo y dejen de estafar los sentimientos de millones de personas. Mis amigos de Brujas vieron en Tele NET, programa Prime Sport, repetidas varias veces las acciones en fuera de juego de Alves y Etoo. Hasta los belgas alucinan con el Villarato.
O Rei Valerón. Es un orgullo ver que el talento es imperecedero. Valerón dio cuatro pases que en la actualidad sólo firmarían Xavi o Guti. Si Bodipo o Riki fueran Ronney o Drogba se habrían hinchado con sus pases de seda ante San Iker. ¡Jugón!
El 7. El Bernabéu reaccionó con furia cuando Raúl fue sustituido por ese misterio con botas llamado Drenthe. El capitán firmó el gol de la victoria. Otra vez. Inmortal. Di Stéfano a un solo gol. Dos leyendas vivas...