Moisés apadrina a Osado, el futuro goleador grana

Cuando Moisés García León debutó en Primera el 6 de noviembre de 2008, Juan Antonio y Pilar, los padres de Osado, todavía no tenían planes de tener un hijo. "No es para hacer la pelota... pero uno de los jugadores que mejor me acogió en el vestuario del Nàstic fue Moisés. Habla mucho conmigo. Me contó que había jugado con Mazinho, el padre de Thiago, mi compañero el año pasado en el Barça juvenil. Le tengo mucho respeto. Su carrera es impresionante", espetó Osado, quien, diez meses después del debut del aragonés en Primera, nació. "Es un gran jugador. Pero su problema es la timidez, tanto en lo personal como en lo futbolístico. Tiene talento y, cuando le den minutos, destacará", argumenta Moisés.

Ambos forman una pareja singular, en la que el veterano podría ser el padre de Juan Antonio, un delantero que alterna los entrenamientos del primer equipo con los de la Pobla y que no se olvida de la experiencia vivida el año del Nàstic en Primera: "Paco Flores me llamó un día para entrenar porque Makukula estaba lesionado. Le gusté y me dijo que volviese la semana siguiente. Un día me incluyó en la lista para ir a Getafe. No jugué, pero la experiencia fue inolvidable". Pero la intrahistoria no se detiene ahí: "Luego, debuté en la Copa Catalunya ante el Barça y me perdí el último partido de Liga, también antes los azulgrana, porque tenía la selectividad... Por cierto, sí la aprobé y ahora estoy estudiando Telecomunicaciones".

A por todas. Juan Antonio lleva desde los cinco años en el fútbol base del Nàstic y ha pasado por muchas posiciones: mediocentro, extremo, lateral... "Hasta que en el Juvenil me puso un entrenador de delantero y me dijo que ése era mi sitio. Me siento igual de cómodo arriba que jugando de mediapunta", dijo el joven futbolista, de sólo 19 años.

Ambos coinciden en que el Nàstic no hará otra cosa que ir para arriba en esta Liga, y que tras las fiestas veremos la mejor versión de este equipo. "Para mí tiene uno de los mejores equipos de la categoría. Irá para arriba, seguro", dijo Osado, y Moisés argumentó: "Me sorprende que no hayamos encadenado antes dos victorias seguidas. El equipo está entrenando bien y no contemplo quedar por detrás del octavo lugar. Tengo clarísimo que nuestro punto de mira de estar en el ascenso". Aunque de generaciones distintas, ambos son ahora el presente del Nàstic.