Liga BBVA | Málaga
"El capote está cogiendo polvo, a ver si lo saco ya"
Entró sereno en la sala de prensa, se expresó en un tono medio, casi bajo. No quiere alzar la voz en otro sitio que no sea un campo de fútbol. Ya se entrena con el grupo y eso le hace feliz, pero prefiere ser cauto. La lesión es demasiado reciente. Eso sí, el hambre de gol nunca se pierde...
El capote está cogiendo polvo, a ver si lo saco ya". Así se despidió Albert Luque en el día de ayer. Tiene hambre. Aunque su tono es sosegado, a nada que se ve mejor físicamente empieza a pensar en fútbol y goles. "Con las lesiones no está llegando ese gol, pero como delantero tengo muchas ganas de marcar. Ojalá llegue pronto, porque además de que tengo muchas ganas de marcarlo, sé que hay mucha gente en Málaga que lo está deseando y es un buen momento para dedicárselo. En los tres años que he estado fuera no he vuelto a celebrar los goles como en España, porque el torero lo hacía en una época en la que era feliz como futbolista. Ahora estoy empezando a disfrutar de nuevo y ojalá vuelva a celebrarlo como lo hacía tres años atrás", insiste Luque una y otra vez.
Tras verle entrenarse ayer, nadie diría que viene de una lesión. Señal que invita al optimismo. "Tengo muchas ganas de volver al equipo. No está fácil entrar, y por eso hay que intentar dar el máximo en los entrenamientos para recuperar el nivel perdido. Si el entrenador me quiere poner de inicio, yo encantado, pero el equipo ganó 0-4 en la última jornada. Tengo que ganarme un sitio", sentenció el catalán.
Luque reitera, como el resto de los jugadores, las lamentables condiciones del Anexo. El principal escenario de trabajo es causante de múltiples problemas físicos. Todos coinciden: "Es inadmisible". Pero Luque se lo toma con buen humor e ironiza: "No está en buenas condiciones, pero es lo que tenemos. Nos entrenamos en el Anexo, así que cuando jugamos en La Rosaleda nos parece el Bernabéu".