Cuartos Eurocopa 2008 | Rusia
"Quiero ser el enemigo número uno de Holanda"
Hiddink, el infalible, ante el desafío de eliminar a su país
Lo que quiero es ser el enemigo número uno de Holanda. No será fácil, pero crecemos cada día", afirmó Hiddink tras meter a Rusia en cuartos y agrandar un poco más su leyenda de seleccionador infalible. Por quinta vez consecutiva, es decir, siempre, una selección dirigida por Guus logra clasificarse para la segunda fase de un gran torneo. No será casualidad.
En Inglaterra 96 y Francia 98 manejaba a su país, Holanda. Un grande, por lo que nadie le concedió méritos. Después el milagro se ha multiplicado por tres: en 2002 con Corea, a la que llevó hasta semifinales tras eliminar a Espa con Australia, que no sólo se metió en un Mundial, el de Alemania 2006, después de 32 años, sino que incluso fue capaz de llegar a octavos y casi eliminar a Italia; y ahora con Rusia, una sombra del equipo imperial disuelto al ritmo de la antigua URSS.
"La última vez que mi selección pasó a una segunda fase, yo lo vi en blanco y negro", comentaba eufórico un periodista ruso. No ha llovido tanto, sí demasiado: hace 20 años, el color no había llegado a la televisión más allá del Telón de Acero. Ese el tiempo, desde 1988, que un equipo soviético y luego ruso llevaba sin probar el sabor del KO en Mundiales y Eurocopas. En aquel torneo, la Euro de Alemania 88, el gran Lobanovsky llevó a los Dasaev, Protasov, Belanov y Mihailichenko a la final. Y la perdieron, precisamente, ante Holanda. En estos días, otro holandés se dispone a restituirles la grandeza perdida. Guus: "Ya tenemos un estilo, y ganas de luchar. Espero que Rusia mejore sus infraestructuras y enseñe a sus chavales lo que significa un equipo nacional. Mis jugadores ya lo saben. Aprendemos rápidamente y espero que pronto estemos en la élite. Ojalá comencemos a hacerlo en estos cuartos".