Eurocopa 2008 - Cuartos | Holanda
De Jong, motor de Van Basten y coleccionista de Cadillacs
"Ojalá pudiera ser como Makelele, aunque mi ídolo es Redondo"
La arrugas de su frente parecen un acordeón que se abre y se cierra según habla. De Jong mantiene una sonrisa perenne mientras da explicaciones a pesar de que su vida no ha sido un camino de rosas. El tumor de estómago que padece su madre, entregada desde hace años a la ayuda humanitaria (fue a Senegal de misión recientemente), ha sido el último golpe. Las continuas visitas de su padre al casino, donde ha dilapidado gran parte de los ahorros del jugador, forman parte de su vida. Pero ni una cosa ni la otra le han desconcentrado del fútbol, pasión que sólo comparte con la del coleccionismo de Cadillacs. "Compro piezas en Estados Unidos y después tuneo los coches a mi gusto. Paso horas y horas así".
De Jong (23 años, pertenece a la quinta de Van der Vaart en el Ajax, en el que ingresó con nueve años) se ha convertido, con Engelaar, en la revelación de Holanda. Realizan un trabajo oscuro, ajeno a los destellos de los Van Persie o Sneijder, pero todas las estrellas coinciden en que sin su trabajo nada sería posible ("Estamos despreocupados, el equipo tiene equilibrio"). De Jong, apodado el pequeño Makelele, agradece el piropo: "¡Ojalá algún día pudiera parecerme a Makelele! Era el rey. No tengo problema en trabajar para los demás. Crecí con Roy Keane y Redondo como ídolos. El argentino ha sido el mejor. En aquel Real Madrid que ganó la Séptima había grandes jugadores, pero él era la clave, en el ataque y en la defensa".
No sorprende su dominio de la historia del Madrid teniendo en cuenta que creció mamando fútbol. Su padre, Jerry, fue un meritorio lateral derecho del PSV que llegó a ser tres veces internacional en las eliminatorias para la clasificación de la Euro 1992.