El Madrid no tendría ningún problema económico para afrontar el fichaje de Cristiano Ronaldo. Al menos eso es lo que dan a entender las declaraciones que ayer realizó Miguel Ángel Arroyo, director general de la Presidencia del club blanco. Otra cosa bien distinta es saber si el astro portugués decide acelerar su salto a la Liga española (ya ha reconocido públicamente que algún día jugará en España).
"El Madrid tiene la solvencia y liquidez financiera para poder afrontar una contratación de la magnitud de Cristiano Ronaldo. Sería, incluso, rentable económicamente por la mercadotecnia y lo que conllevaría", afirmó Arroyo. Y una vez conocida la viabilidad de la que sería la operación del verano, falta que el futbolista termine de deshojar la margarita. El pasado martes afirmó sentirse cómodo en el Manchester (club con el que ha ganado su segunda Premier seguida y con el que la próxima semana jugará la final de la Champions), aunque su entorno y sus agentes no dudan en abrirle la puerta al Madrid.
Momento clave. Precisamente tras la final europea y antes del inicio de la Eurocopa se podría cerrar la operación. Cristiano Ronaldo está molesto con el Manchester porque no se respetó la promesa de revisar su contrato a finales de este curso. Mejor, pensarán en Madrid. Y es que el portugués tiene actualmente contrato hasta junio de 2012 y una cláusula de penalización por rescisión unilateral de 70 millones de euros. Esa cifra sería asumible por las arcas blancas. Más difícil, que no imposible, sería llegar a los 127 millones que sería la cláusula de penalización si renueva su contrato hasta 2014 (cobraría 9,4 millones limpios por campaña).
Por si acaso, Arroyo mandó un último recado: "Si el Madrid no ficha a alguien que desee no será por imposibilidad económica del club, sino por otros motivos". El culebrón por Cristiano Ronaldo continuará...
El portavoz que maneja los hilos
Ramón Calderón nombró a Miguel Ángel Arroyo jefe de gabinete de la presidencia y de protocolo, además de portavoz del club blanco, en 2006. Antes fue director de la Fundación del Madrid entre 2002 y 2006 con Florentino Pérez. Arroyo es Licenciado en Derecho y Diplomado en Métodos de Investigación Social y en Administración Pública. Discreto y trabajador, pertenece al Cuerpo Superior de Administradores Civiles del Estado, en situación de excedencia voluntaria.
