"Tamudo volverá a callar al Camp Nou"

Ya vemos... De consejero a impulsor de una iniciativa que quiere acercar a los deportistas a las aulas.

Sí, todo empezó hace dos años cuando estaba pachucho en casa. Le di vueltas a la cabeza sobre mi condición de deportista frustrado. Porque en fútbol jugué de medio estorbo y casi siempre fuera del campo, como tenista sólo tengo algún buen golpe y como golfista vivo resignado a mi suerte. Entonces, pensé que al deportista profesional hay que buscarle una salida, que no solamente sepa jugar a eso que tan bien. Quise ayudar a los que son héroes, los ídolos de mi hijo como es el caso de Iván de la Peña o Raúl Tamudo, o el chaval Andrés Iniesta para la gente del Barcelona.

Para que haya un más allá después de la retirada.

En efecto, porque la vida del deportista es corta. Son muchas tardes de gloria que de la noche a la mañana se apagan como nada. Les admiro a todos ellos porque ser deportista de elite es muy sacrificado. Pero luego te retiras y nadie te invita más a comer, no te esperan a la puerta del estadio. Se encuentran solos en la vida.

Pero con mucho dinero, o al menos es lo que parece.

Un buen capital no da una formación académica adecuada como para afrontar vivir en un habitat nuevo, que no ha sido el tuyo hasta que ya has entrado plenamente en la treintena.

Todos los cracks a las aulas pues...

No estoy diciendo que se saquen una carrera en cinco años, no pretendo eso ni mucho menos. Por eso hemos preparado los estudios de Periodismo, Publicidad y Relaciones Públicas en régimen semipresencial. Se trata de aprovechar todo el tiempo libre que tiene ahora y no gastarlo en pasar las tardes con la Playstation.

¿Es Rafa Marañón el ejemplo en clave perica?

Sí, él, Fernando Molinos y muchos otros. Marañón es todo un doctor arquitecto. Buscamos personas capacitadas para la vida además de con facilidad para ejercer su profesión en un terreno de juego, en una cancha de baloncesto, pista de tenis... Queremos que tengan un camino.

Hablando de camino. ¿Cuál tiene el Espanyol?

Ganar en el Camp Nou, no nos queda otra.

Usted ya acertó la porra del AS en un derbi de la temporada pasada.

No lo olvidaré, el 3-1 en Montjuïc. Para el sábado espero un 1-2 con goles de Ferran Corominas y Tamudo. Creo que el capitán volverá a hacer callar al Camp Nou. Sólo les podremos vencer si nos desacomplejamos de una vez. Y además, el Barça está en un momento en el que es vulnerable. A ver si nos damos una alegría porque últimamente no dejamos de perder ya sea en sábado o en domingo. Vencer allí después de tantos años sería un estímulo muy especial.

¿Qué le ha pasado al Espanyol en los últimos tiempos?

No han sabido gestionar el éxito.

¿Quién?

Desde arriba. Ni ha habido humildad ni trabajo.

Toma.

No puede ser que hayamos llegado a este punto. La situación ya debería haberse atajado desde esos dos partidos que perdimos en el mes de enero. Ya se veía que veníamos ganando por un gol y con mucha fortuna. A la que se acabó la suerte se acabó todo.

¿A quién señala?

Al vestuario y al entrenador. Valverde no se cuadró cuando debía con todo lo que estaba sucediendo en el equipo. Ahora ya ha perdido todo el crédito. Tampoco el presidente supo manejar bien la situación.

Mándele pues un consejo a su buen amigo Dani Sánchez Llibre, que seguro que se lo va a tomar como una buena lección.

Que venda todo lo que pueda. En verano no hay que tener complejos. Este equipo necesita una revolución, y lo digo desde el más profundo de los cariños hacia todo el mundo. Hay que tener más filosofía de trabajo. Llevamos tiempo sobre el alambre y ya nos hemos caído. Once derrotas en los 14 últimas jornadas son muchas, demasiadas. Este equipo ya demostró en su día que era verdaderamente capaz. Hay que reconducir la mala racha desde el trabajo en grupo, reconociendo nuestra humildad y lo mucho que nos ha costado llegar hasta aquí.

¿Qué es más difícil de sobrellevar, la crisis del Espanyol o la crisis financiera a nivel mundial?

Sin duda será más difícil de resolver la crisis del Espanyol.

¡Cómo!

Es tan sencilla como que la crisis económica se soluciona con poca deuda, capitalización y gestión del resultado. Esas son las soluciones que todos los expertos tienen en su cabeza. En cambio el fútbol es mucho más complicado que todo eso. Si fuera fácil entonces no tendría tanto méritos ganar en el Camp Nou. Por cierto, que el sábado voy a estar en la grada para animar a los jugadores de Valverde.

¿Y por qué es tan difícil el fútbol?

Si llevamos tantos años en intentar descifrarlo es porque no tiene solución. Para el Espanyol yo daría la mía. Necesitamos una estructura de club mucho más sólida que la actual, con un control desde la directiva. Y no creerse nunca que somos los mejores en nada. Eso nos pasó a todos en la primera vuelta. Valverde se equivocó al pensar en lo que ya había ganado la semana anterior antes de afrontar el siguiente encuentro. Es un tópico pero también es una realidad: hay que ir partido a partido sin pensar en lo recorrido.

Pues ala, vaya al Camp Nou que tampoco toda la culpa la debe tener Valverde.

Ni mucho menos. Aquí juegan todos, así como ganaban todos en los meses en los que nos sentíamos casi invencibles.