Alcaraz tira de su tropa

Cuando se enfrentan el tercero por abajo y el tercero por arriba huelga hablar de las diferencias siderales con las que se juega esta previa (lo de partido en si puede ser otra historia). También son notablemente dispares los planteamientos futbolísticos que ponen encima de la mesa Alcaraz y Pellegrini. Uno, el granadino grana, obligado a la pelea, a la lucha y al agonismo para sobrevivir y el otro, el chileno del Villarreal, entrenador de éxito, de buen fútbol, de mejor prensa y bandera del fantasismo en nuestra Liga.

Lo que les une a ambos es la necesidad de ganar esta noche. Para salir del fondo los locales; para consolidarse como alternativa a Barça y Madrid y perpetuarse en Champions los azulejeros. Lo cual, dicho sea de paso, puede beneficiar al espectáculo y a un espectador que, si todo sigue el guión, nos deparará a un Murcia agazapado y laborioso intentando cazar presa a la contra y un Villarreal al que, pese a su colección de bajas, se le presupone el control, el dominio y el mando que normalmente suele desempeñar el equipo que hace de local. Y no tiene pinta de ser así por la sencilla razón que los grana de Alcaraz ya se han terminado de convencer (lo hicieron el pasado fin de semana en el Calderón) que su éxito pasa por acumular futbolistas atrás, por afanarse en las ayudas y la destrucción y por llegar a la carrera y con pocas unidades. Si alguna vez a lo largo del año el Murcia quiso jugar y mandar, eso parece ya olvidado. El Murcia volverá a ser alcaraciano y contará con un equipo plagado de currelas que esperan que Pablo García recupere su mejor tono y que Goitom e Iván acierten en alguna de las contadas ocasiones que tendrán los murcianistas si todo va conforme al libreto.

Porque enfrente, y pese a las ausencias de tipos tan determinantes en cualquier equipo de primer nivel mundial como Tomasson, Matías o Senna, llegará un equipazo desde Diego López al killer Guille Franco ante el que el Murcia jugará la primera de sus ocho finales como local.

Jornada especial para César Arzo y para Josico

En la Nueva Condomina, muy cerca de su Hellín del alma, en el que pudo ser su campo (Alcaraz lo pretendió el pasado verano), José Joaquín Moreno Verdú, Josico disputará su partido número 150 como jugador de Primera con el Villarreal. Una cifra redonda que le convertirá en el tercer jugador con más partidos en la Liga de los Ases del cuadro amarillo tras Arruabarrena (219) y Quique Álvarez (187). También será emotivo el encuentro para el hoy central grana, Cesar Arzo. Cedido hasta el final de la presente temporada por la entidad que preside Fernando Roig, Arzo liderará a la defensa murcianista ante el equipo que le vio nacer y al que aspira a volver el próximo curso.