Quirante: madridista ocasional
José Quirante Pineda nació en Alicante en 1884. Vivió los inicios del fútbol español en Cataluña. Jugaba de medio ala y perteneció toda su vida al Barcelona pero cuando viajaba a la capital formaba parte del Madrid. Así lo hizo entre 1906 y 1908. Al retirarse se hizo entrenador profesional y, entre otros, también dirigió al conjunto blanco.
C. Wallace: acompañó a Quirante
Charles Wallace fue uno de los representantes de Inglaterra en el fútbol español. Este extremo engrosó las filas del Barcelona en compañía de su hermano Percival. Charles acompañó a Quirante en sus intervenciones ocasionales con el Madrid, en el que participó entre 1906 y 1908. Al menos disputó un partido del Regional.
Albéniz: un año en el Madrid
Después de nueve temporadas vistiendo la camiseta azulgrana, Alfonso Albéniz (Barcelona, 1886) pasó al Madrid, donde jugó entre 1911 y 1912, generalmente como interior. Posteriormente organizó el Stadium madrileño, de cuya línea atacante formó parte entre 1915 y 1918. Antes de llegar a España vivió en Inglaterra y Francia, donde practicó el rugby.
A. Comamala: reforzó la delantera
Nacido en Barcelona en 1888, Arsenio Comamala se inició de azulgrana junto a su hermano Carlos, célebre goleador del equipo catalán en la primera década. Abandonó la disciplina del Barça en solidaridad por lo que consideró la expulsión injusta de Quirante y de ahí pasó al Madrid, donde jugó de delantero entre 1911 y 1913.
W. Rozitsky: precursor de Dudek
Hasta el fichaje de Dudek, Rozitsky fue el único jugador polaco en la historia del Madrid. Actuó como medio ala en el Barcelona entre 1911 y 1913 y de ahí pasó al equipo blanco, donde militó de 1913 a 1915.
Samitier: ganó la primera Liga
Histórico del Barça, en el que jugó durante 15 temporadas, José Samitier también exhibió su calidad en el Madrid. El mago se vistió de blanco cuando tenía 31 años, jugó desde enero de 1933 a 1934 y con él el club ganó su primera Liga.
A. Navarro: dos tantos de blanco
Joaquín, su hermano, fue el hombre clave para que Alfonso Navarro fichara por el Madrid. Llegó al equipo tras cuatro temporadas de azulgrana. Jugó entre 1950 y 1952 y marcó dos goles en cinco partidos de Liga.
Tejada: consiguió dos títulos
Extremo derecho del Barcelona desde 1953 a 1961, ganó la Liga en las dos temporadas que jugó en el Real Madrid (la 61-62 y la 62-63). Con la camiseta blanca marcó 21 goles en 51 partidos oficiales.
Evaristo: en la cuesta abajo
El delantero brasileño se incorporó al Madrid en 1962, tras triunfar en su cinco campañas de azulgrana. Tenía 29 años y aunque conquistó la Liga en la 62-63 y la 63-64 no brilló como se esperaba. Marcó cinco goles en 19 partidos.
Goyvaerts: una Liga sin casi jugar
Interior belga del Brujas que fichó por el Barcelona en 1961, donde no jugó de forma oficial hasta 1963. Estuvo en el club catalán cuatro años, aunque no participó mucho, y al quedar libre firmó dos campañas por el Madrid (del 65 al 67). Aquí tampoco jugó casi nada (un gol en tres partidos) pero ganó la Liga 66-67. Al dejar el Bernabéu se marchó al Elche.
Schuster: cerebro del Madrid de los 107 goles
Llegó de la mano de Mendoza después de ocho temporadas de azulgrana. Jugó dos años en el equipo blanco y ganó todo lo posible en España: dos Ligas, una Copa del Rey y dos Supercopas. Fue uno de los hombres clave en aquel Madrid que marcó 107 goles en el campeonato 89-90 y su labor en el centro del campo permitió que La Quinta del Buitre brillara más que nunca. En octubre de 1990 se marchó al Atlético.
Milla: se resarció en el real
Un producto de la cantera azulgrana al que Mendoza fichó en la 90-91 tras pagar su carta de libertad. El mediocentro se lesionó gravemente en verano pero acabó jugando hasta 1997 en el Madrid y ganó dos Ligas y una Copa del Rey.
Nando: jugó 64 partidos
El central sevillano defendió los colores madridistas cuatro temporadas (del 92 al 96). Llegó como campeón de Europa con los azulgrana y se marchó con un título de Liga, el que los blancos sumaron en la 94-95. Disputó 64 encuentros oficiales de blanco.
Laudrup: un 'robo' de Mendoza
Otro 'robo' de Mendoza, que pagó 200 millones al Barça por el genial danés. Jugó 76 partidos, marcó 15 goles y ganó la Liga 94-95. Pero más allá de los números, dejó huella en la afición por su juego exquisito, sus pases de gol y la calidad con la que hacía todo.
Figo: el fichaje que hizo presidente a Florentino
El futbolista que hizo tambalearse el puente aéreo. Su fichaje permitió a Florentino Pérez alcanzar la presidencia madridista en las elecciones del año 2000. Costó 11.900 millones de pesetas (sumando la cláusula y el IVA) pero su salida dejó hundido al Barcelona. Jugó en el Madrid cinco temporadas. De blanco ganó, entre otros títulos, dos Ligas, una Champions, una Supercopa de Europa y una Intercontinental.
