¿Aguantarán los jugadores la mano dura de Capello?

Por supuesto. Ellos quieren hacer un trabajo serio y muy físico para sentirse mejor. Los títulos se ganan entrenando y la disciplina de Capello no va a crear problema alguno.

¿Míchel será importante en este proyecto?

Muchísimo. Va a tener una libertad total para coordinar las categorías inferiores. No sólo se ocupará del Castilla. Hay mucho por hacer. Hemos encontrado cosas que no se entienden, pero que Míchel ya las está cambiando.

¿Tantos amiguismos han detectado en la cantera?

Totalmente. No quiero profundizar en un área que es de Míchel, pero esto va a cambiar. Durante la campaña, Míchel me dejó claro que conoce esta casa y sólo hay que dejarle tiempo porque en seis meses no le puede dar la vuelta al calcetín por entero.

Durante años no ha subido nadie del Castilla que se quede en el primer equipo.

Algunos van a hacer la pretemporada con Capello. Fabio sabe escanear a los jóvenes. Si alguno le demuestra que tiene hambre y ambición seguro que se quedará.

¿No está un poco 'amanerada' la cantera?

Es posible. Aquí se hablaba de Zidanes y Pavones y era obligado subir jugadores al primer equipo para mantener la filosofía, pero sin valorar su calidad. Eso ha sido nocivo porque a los chicos les han llovido las críticas y no era su culpa. Subir a un chico que no da el nivel es matarlo. Aquí se ha perdido el tiempo con chavales que han pasado de la veintena quedándose estancados en el Castilla. Con nuestra filosofía, un jugador que va a triunfar debe saberse con 17 años. Al primer equipo hay que subir con un máximo de 19. Eso de subir con 22 o 23 años se ha acabado. En Holanda trabajan así.

Con Butragueño, Ramón Martínez y Floro no le ha temblado el pulso. Están fuera.

Era normal que sucediera así. Ha llegado gente nueva con otras ideas. En otras coincidimos porque somos gente de fútbol, pero ellos han tenido unas dificultades tremendas. La filosofía de fichajes era distinta y debía enfadarles. Pero no han podido cambiar nada y eso no lo entiendo.

¿Usted hubiera tenido la actitud de Butragueño?

Emilio es amigo mío, maravillosa persona y gran profesional. Cada individuo es distinto. A mí me gusta tener poder de decisión y responsabilidades. Y si no lo hago bien, que me echen. Si estos años veo que mi opinión no cuenta, no aguantaría. Lo que no podemos permitir es que por mirar tanto al pasado no tomemos decisiones que aclaren el futuro.

¿Qué papel tendrá Baldini, su secretario técnico?

Fundamental. Es hombre de fútbol, con experiencia ilimitada y la seguridad de que está en mi onda. Vamos a trabajar mano a mano y Capello confía en él porque trabajaron juntos en Roma. Tenemos pocos riesgos de equivocarnos. Su peso para negociar, siempre a mi lado, es total.

¿La posible amnistía puede estropear su asalto a los jugadores de la Juventus?

No le deseo mal a la Juve y no deseo que baje. Que paguen las personas que hicieron mal las cosas, no el club. Pero no creo que haya amnistía. Todo lo que han investigado durante dos años no debe ir a la papelera por ganar un Mundial. Pero eso no influirá en nuestro proyecto. Los futbolistas de los que se han hablado quieren venir y eso es clave.

Por cierto, mucho 'jogo bonito' pero mi padre dice que 'ná de ná'.

Yo pregunto: ¿quién ha hecho un jogo bonito en este Mundial? Hasta mañana podríamos discutir del jogo bonito. ¿Qué es mejor, jugar bonito y perder o hacerlo menos vistoso y ser implacable con los rivales? Cuando uno gana títulos es imposible jugar feo. Por eso hay mucha demagogia. Nadie gana jugando mal al fútbol.

O sea, como ha hecho el Barça esta temporada.

Del Barça se ha dicho que era el rey del jogo bonito. Pero el año pasado vi que hizo partidos feos, feísimos, y como han ganado Liga y Champions son unos fenómenos. El Barça, en el 0-3 del Bernabéu, no discuto que fue jogo bonito. Pero por un partido no puedes catalogar un estilo. Eso va a cambiar con el Madrid este año.

Acabo. Capello dijo en su presentación que lograría recuperar el espíritu de la camiseta blanca. ¿Sólo palabras?

Todos estamos con enormes ganas de cambiar esta historia. Yo conozco el camino de Cibeles y se lo contaré a los jóvenes. El Bernabéu va a vibrar como en los viejos tiempos. La afición está cansada de ver que el Barcelona te gana 0-3 y tienes que aplaudirle encima. O de que 300 culés vayan a Cibeles a regodearse tras ganar la Champions. El madridismo no podía ni enfadarse porque se habían hecho las cosas tan mal que la gente estaba resignada. Por eso digo que si ganamos un título, y lo vamos a hacer, fíjese de qué manera se va a celebrar por las calles de España entera. Millones de aficionados del Madrid esperaban su momento. Y ese momento ha llegado ya...