Joaquín sólo se irá del Betis al Madrid

Joaquín ya ha tomado una decisión. O Lopera le hace un supercontrato que incluya una sustancial mejora o se irá al Real Madrid. El buque insignia del Betis le ha transmitido a Manuel Ruiz de Lopera su pensamiento sobre su futuro inmediato. Ni Barça ni Chelsea. Los dos han llegado tarde. El mandatario bético lo sabe y eso le simplificará la estrategia a seguir con Joaquín. Al no haber puja por el crack del Puerto de Santamaría, todo se reducirá a una negociación con Florentino. Si hay acuerdo con Lopera, que podría rondar los 20 millones de euros, Joaquín verá cumplido su sueño de jugar en el Madrid. De lo contrario, renovará con el Betis y se convertiría en el Raúl del club verdiblanco.

Ayer mismo, en el salón de actos del colegio San Antonio María Claret (aprovechando el Encuentro con los Ases convocado por este diario), Joaquín dio a entender ante 400 seguidores béticos que deben mentalizarse sobre su marcha: "Soy feliz aquí, pero al fútbol lo bordea siempre el negocio. Si mi salida fuera una realidad y fuese positivo para ayudar al Betis, aquí estoy".

Un aficionado bético apeló a la continuidad de Joaquín con una frase única: "Porque Dios se lo manda, usted es el rey de la banda". Pero Joaquín, torero él (de hecho es su vocación frustrada), respondió con madurez: "Me iré donde me diga el Betis. Eso hay que hablarlo con el presidente. Hombre, si él me echa una manita y me da dos años más, todo arreglado". La risas de la concurrencia taparon una realidad que AS les puede confirmar. El internacional aspira a ser el primer fichaje español de la era Florentino. Se casa en junio, ha madurado en todos los sentidos y cuando va a la Selección las bromas con Raúl y Casillas sobre su futuro blanco son habituales.

Incluso, gente del entorno del jugador ya le ha sondeado sobre las diferentes zonas residenciales en las que podría vivir en la capital con su futura esposa, para que estuviese integrado desde el primer momento en su nuevo destino. También le ayuda a Joaquín saber que con el AVE tiene la ciudad de sus amores a sólo dos horas y media de camino.

Joaquín no quiere saber nada del Barcelona, que ya le ha sondeado, ni del Chelsea, dado que su amigo Reyes le ha informado sobre lo complicado que es adaptarse al clima lluvioso y la vida de Londres. Por eso Joaquín no se andará por las ramas: "O blanco o verdiblanco".

El propio Lopera sacó de dudas al personal al hablar de la oferta de Abramovich: "Joaquín no se quiso comer en Navidad los mantecados fuera del Puerto de Santa María y por eso no se fue". La cláusula de rescisión de Joaquín, 60 millones de euros, es negociable a la baja. Florentino y Lopera hablarán al acabar la Liga. Betis o Real Madrid. Joaquín espera.