La revolución de la cantera madridista

Convertir a la cantera en un elemento diferenciador con respecto a otros equipos es su principal objetivo. Para ello, ha revolucionado el anterior organigrama de la Ciudad Deportiva: "Muchas cosas han cambiado. Hemos renovado a la mayoría de los técnicos. Ahora, todos tienen titulación específica en el área de la educación física y pedagógica. Además, nos preocuparemos de que los entrenadores reciban la formación adecuada. Aumentando la capacidad de los técnicos se mejora el rendimiento del juego. Queremos que todos los equipos mantengan la misma línea de trabajo, si no, lo que haces un año no sirve para el otro".

Con las ideas no basta. Por eso, el club ha dedicado parte del presupuesto a una renovación de la infraestructura para el fútbol menor. Una oficina habilitada en la Ciudad Deportiva servirá de lugar de reunión para los técnicos, que además podrán disponer de biblioteca, videoteca e informatización de los datos de las diferentes plantillas. La personalización en el trato será la clave del éxito. Casi todos los equipos contarán con dos técnicos, lo que permitirá una atención más individualizada. Habrá tres capitanes por equipo y un reglamento interno de conducta. Además, Giráldez ha creado un gabinete psicológico para salvaguardar las relaciones jugadores-padres-técnicos. "Tardaremos tiempo en conseguirlo, pero estamos en buen camino".