Único equipo en la historia de Oceanía en alcanzar unas semifinales del Mundial de Clubes (2014) y referencia actual del fútbol neozelandés y oceánico, el Auckland City ha logrado entrar en la historia gracias a un catalán que hizo allí carrera como futbolista pero sobre todo después como técnico: Ramón Tribulietx. Su apuesta por el estilo español y por los jugadores nacidos en nuestro país no ha podido ser más exitosa.
Ha ganado seis Champions seguidas y otras tantas ligas de Nueva Zelanda. Se ha convertido en un icono de los banquillos en un país con poco arraigo futbolístico, pero también muchas posibilidades. Ha sabido, en definitiva, evangelizar una tierra con los métodos y los conocimientos que aprendió a lo largo de sus años en el fútbol.
Por eso es considerado toda una institución en el país y ya ha despertado el interés de clubes poderosos de Australia, con muchas más posibilidades económicas que el City. Así, con una plantilla bien conformada y jugadores con cada vez más nivel, domina las competiciones oceánicas como hizo este año levantando la Champions en la final ante su rival neozelandés Wellington Phoenix. Un conjunto cada vez más fuerte Auckland. Ya no es la cenicienta del Mundial de Clubes.