Insólito

Imputados los padres de Natalia Grace tras abandonarla "por tener 20 años y ser psicópata"

El matrimonio decidió abandonar a su hija adoptiva tras descubrir que era una mujer de 22 años con enanismo y psicópata que “había intentado matarlos”. La familia se marchó de EE UU a Canadá sin ella

A veces la realidad supera a la ficción y este es uno de esos casos. El matrimonio formado por Kristine y Michael Barnett ha vivido una situación de lo más inusual que está dando la vuelta al mundo. Todo comenzó cuando la pareja decidió adoptar en 2010 una niña ucraniana que se encontraba en situación de emergencia en un orfanato de Florida.

El matrimonio se encuentra consternado ya que en ese momento nadie les avisó que esa niña era en realidad una mujer adulta con enanismo. La supuesta niña, Natalie Grace, no tenía diez años tal y como figuraba en sus papeles sino veintidós. La pareja comenzó a dudar tras ver cómo la niña utilizaba un lenguaje adulto y que incluso tenía la menstruación. Los Barnett aseguran que la adopción de Natalie Grace fue un fraude ya que en el año 2010, la 'niña' no era tan niña como pensaban. Para demostrar tal afirmación, Kristine Barnett mostró una prueba médica con registros dentales y un examen de sus órganos sexuales donde se aseguraba que la edad de su hija adoptiva era "claramente inexacta". El doctor llegó a afirmar que Natalie tendría más de 18 años cuando fue adoptada.

Ahora Kristine y Michael se encuentran imputados por la justicia estadounidense por abandonar a su hija adoptiva y trasladarse a Canadá para vivir con sus otros hijos biológicos aunque ellos alegan que dejaron a Natalie con "todos los gastos cubiertos", pagándole el alquiler. Todo se truncó cuando la policía accedió al interior del apartamento por impagos donde se encontraron a la niña que aseguró tener nueve años y que sus padres la habían abandonado a su suerte.

Según apunta el diario británico 'Daily Mail', los padres adoptivos son las únicas víctimas en este extraño caso ya que Natalie quería matarlos. "Hacía declaraciones y dibujos diciendo que quería matar a miembros de la familia, enrollarlos en una manta y enterrarlos en un patio. Se quedaba casi sin dormir muchas noches. No podíamos irnos a dormir y hasta escondimos todos los objetos afilados", explica Kristine.

"Los medios de comunicación me pintan como una maltratadora de niños pero aquí no hay ningún niño. Saltaba del coche en movimiento. Manchaba los espejos con sangre, hacía cosas que nunca podrías imaginar de una niña pequeña. El estado de Indiana me está acusando de crímenes contra una niña a pesar de que se determinó varias veces que Natalia es adulta", continúa contando la mujer.