NOSTALGIA LIGUERA

Los equipos que la Liga echa de menos (IV): el Zaragoza

Los maños luchan por volver a Primera tras cuatro temporadas alejados de la élite

JAVIER BELVER

El Real Zaragoza es uno de los grandes clásicos que La Liga echa de menos. El conjunto maño ha disputado hasta en 58 ocasiones la Primera División española y es el noveno equipo en la clasificación histórica de la competición doméstica. La época más gloriosa del conjunto aragonés tuvo lugar en la primera mitad de los años 90. En el curso 1993-1994 los zaragozanos finalizaron terceros en La Liga y ganaron su cuarta Copa del Rey. Al año siguiente, en la 94-95, un gol imposible de Nayim le daba al Zaragoza y ante el Arsenal la Recopa, su único título europeo hasta la fecha.

Eso sí, esa época gloriosa ya ha sido mil veces contada. Nos centraremos en la siguiente etapa en la que el Zaragoza estuvo entre los grandes. En la temporada 1999-2000, la que cerraba la década de los 90, el conjunto aragonés volvió a estar en los puestos de cabeza en La Liga. Fue una competición igualadísima, con el Deportivo de la Coruña de Irureta campeón con 69 puntos y el Zaragoza en cuarta plaza, tras el FC Barcelona y el Valencia y por delante del Real Madrid, que eso sí, le quitó la plaza de Champions al ganar su octava 'orejona' en París.

En ese equipo que finalizó en cuarta plaza y que entrenaba 'Txetxu' Rojo destacaban Aguado y Paco Jémez en la zaga, Aragón, Vellisca o el 'Toro' Acuña en el centro del campo, y Juanele y Milosevic en posiciones atacantes. El yugoslavo Milosevic, de hecho, fue el máximo goleador del equipo con 21 tantos y eso le valió su pase al por entonces adinerado Parma italiano.

Roberto 'Toro' Acuña en un partido ante el Oviedo en La Romareda perteneciente a la temporada 1998-1999. JAVIER CEBOLLADA (EFE)

Eso sí, el alma del equipo era el 'Toro' Acuña, talentoso centrocampista paraguayo de origen argentino que disputó cinco temporadas con el Zaragoza antes de marcharse al Deportivo de la Coruña, donde seguiría obsequiando al público con su magia. A día de hoy Acuña tiene 45 años, sigue en activo a pesar de su avanzada edad y hasta el año pasado seguía jugando en la Primera División de Paraguay. Un ejemplo de longevidad.

El equipo, a pesar de la baja de Milosevic, consiguió en la temporada 2000-2001 otro éxito, ganando su quinta Copa del Rey. El paso adelante de jugadores como José Ignacio, Jamelli o el siempre imprevisible Esnáider dio sus frutos y con Luis Costa en los banquillos -que sustituyó a Juanma Lillo tras las cuatro primeras jornadas- se levantó otro nuevo trofeo, aunque en Liga la escuadra zaragozana acabó pidiendo la hora, finalizando en 17ª posición, a un solo punto de los puestos de descenso.

En el curso 2001-2002 los peores presagios se cumplieron. Hasta tres entrenadores pasaron por el club y ni los refuerzos, con la vuelta de Milosevic y los fichajes de Esequerdinha, Bilic o Galletti, ni los referentes clásicos como Acuña o Juanele, pudieron evitar el descenso a Segunda División. Afortunadamente la travesía en el desierto duró solamente un año con Paco Flores dirigiendo al equipo desde el banquillo y un sempiterno suplente como Yordi destapándose como gran goleador del equipo con 15 tantos.

La temporada 2003-2004, la de la vuelta a la élite, tuvo dos grandes protagonistas. El primero fue David Villa. El delantero asturiano debutó en Primera División tras destacar en Segunda con el Sporting y lo hizo a la grande anotando 17 tantos en Liga. Además, la marcha de Acuña, la retirada de Aragón y la bajada de nivel de Vellisca y Juanele facilitaron la irrupción de un centro del campo joven, aguerrido pero también con talento conformado por jugadores como Ponzio, Cani o el brasileño Savio Bortolini, que desplegó en Zaragoza la magia que en el Santiago Bernabéu solo había podido demostrar con cuentagotas. En la defensa, el mariscal era Gabi Milito, descartado anteriormente por el Real Madrid debido a un supuesto problema en una de sus rodillas.

El segundo protagonista del Zaragoza fue Luciano Galletti, autor del gol decisivo en la final de la Copa del Rey ante el Real Madrid en un encuentro resuelto en la prórroga. El mal inicio de año obligó al club a destituir a Paco Flores. El experimentado Víctor Muñoz se hizo con los mandos y el equipo salió de los puestos complicados en Liga y destacó en la Copa, eliminando al Barcelona en los cuartos de final.

En el partido por el título, los blancos se adelantaron con un gol de Beckham, Dani empató al poco tiempo y un penalti transformado por Villa al filo del descanso puso a los maños por delante. La charla de Queiroz, entrenador blanco, debió surtir efecto ya que a los dos minutos de la reanudación Roberto Carlos puso el 2-2. Aun así, el partido acabó en la prórroga y se decidió con un golazo lejano del argentino Galletti, que pasó a la historia del conjunto aragonés al darle su sexta Copa del Rey.

Luciano Galletti celebra el gol en la final de la Copa del Rey 2003-2004 ante el Real Madrid. GUSTAU NACARINO (REUTERS)

El Zaragoza ganó la Supercopa de España a inicios de la temporada 2004-2005 y dos cursos después finalizó sexto en Liga, con un equipo de calidad liderado por los hermanos Milito -Gabi y Diego-, Aimar, D'Alessandro y Ewerthon, pero en general el club fue perdiendo fuelle con el paso de los años debido a la mala gestión de sus dirigentes en los despachos.

Eso sí, la última gran alegría que dio el Zaragoza a sus aficionados fue en la Copa del Rey, su competición fetiche. En las semifinales de aquel torneo, en la temporada 2005-2006, los aragoneses deleitaron a sus aficionados con un magnífico 6-1 al Real Madrid en La Romareda, con cuatro goles de Diego Milito y dos de Ewerthon. Los blancos intentaron una remontada épica y en la vuelta ganaban 3-0 en el minuto 10 pero los maños no dejaron que la eliminatoria se les escapase y aguantaron la renta, perdiendo finalmente por 4-0 y accediendo a una final que, eso sí, perderían ante el Espanyol por un contundente 4-1 en la final.

Olvidadas las gestas ante el Real Madrid, los problemas económicos del clubaumentaron, en 2009 el Zaragoza descendió a Segunda y aunque solamente tardó un año en volver, en 2013 volvieron a finalizar colistas, consumando un nuevo descenso. Desde ese momento y a pesar de producir buenos productos de la cantera como Vallejo -defensa del Eintracht cedido por el Real Madrid- sigue intentando salir del pozo que es para un histórico la Segunda División. La Liga Santander, desde luego, sigue echando de menos a un clásico como el Zaragoza.