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De Johann Strauss a Ana Obregón: canciones que también sonaron en la Vuelta

Repasamos las canciones de las tres últimas decadas de la Vuelta ciclista a España

La Vuelta es una de las tres grandes competiciones ciclistas -Grandes Vueltas- junto con el Giro de Italia y el Tour de Francia. Se celebra durante tres semanas entre agosto y septiembre, pero la fecha depende de la organización. La historia de la Vuelta se remonta a 1935, con un recorrido de 14 etapas y 3431 kilómetros. El evento se popularizó en la década de los 80. Aprovechando el tirón cultural de la música con el de la Vuelta, en 1977, la organización seleccionó el primer tema que sería el distintivo musical del evento de ese año: una versión disco de Singin' in the Rain firmada por Sheila & B. Devotion.

Por si no es lo suficientemente épico imaginarse a los ciclistas en su maillot subiendo y bajando a ritmo setentero -muy workout todo- al año siguiente, la canción elegida fue diametralmente opuesta. Johann Strauss murió en 1889, pero si hubiera podido asomarse a 1978 hubiera visto su 'Trisch Trasch Polka' para promocionar la vuelta. En 1979 la organización volvió a apostar por un sonido disco y entre guitarras funky y vientos de jazz, la banda sonora de la Vuelta la firmó el francés Patrick Hernández con 'Born to be alive'. Esta puerta giratoria musical dio paso al año siguiente, 1980, al mítico tema de Lipps Inc, 'Funky Town'. Mucho fade out y cencerro por todos los lados. En 1981, más de lo mismo con Stars on 45 con su tema homónimo, un mashup de música sesenta y setentera muy en la línea de la canción de la Vuelta hasta esa fecha.

No fue hasta 1982 que se estrenase un grupo español en la lista de canciones de la vuelta. El synthpop de Azul y negro se coló por todo lo alto con su hit 'Me estoy volviendo loco'. Tanto gustaron que, al año siguiente, hicieron doblete con 'No tengo tiempo'. Y sí, en 1983 esto se bailó en todas las discotecas de España. El funky y el disco habían muerto. Oficialmente España había entrado en la edad de oro de su escena pop.

La confirmación de que no teníamos nada que envidiar a la antes conocida como canción moderna, la dio Tino Casal en 1984 poniéndole música a la Vuelta de aquel año con 'Pánico en el Edén' de su álbum Hielo Rojo. En 1985, Iván -el de Fotonovela, entre otros éxitos- tomó el relevo de Tino Casal y fue el protagonista de la Vuelta musical con 'Baila'.

En 1986, Miami Sound Machine triunfaron en las pistas españolas con los ritmos latinos de su 'Conga', lo que también se tradujo en representar a la Vuelta aquel año. En 1987, un declive más experimental se postuló como canción de la Vuelta 'Tic tac tic tac' de Magic Mix. Una banda que tampoco tuvo mucha proyección, quizá debido a que el único tema de la cara A de su single duraba 17 minutazos. En 1988, un Serafín Zubiri alejado del piano de cola y mucho más pop, le ponía voz a la banda sonora de la Vuelta. Otro ejemplo de que se hacía buena música Marca España. Mención de honor al estilismo beisbolero y a las coristas.

Los sintetizadores y las guitarras acompañaron a los ciclistas durante más de una década. En 1989, La Unión lanzaba 'Más y más' con unos prominentes riffs de guitarra que contrastaban con unos gorgoritos raros en la voz de Rafa Sánchez y unos 'nena' a modo de guilty pleausure. Gustaron tanto que repitieron en 1991 con 'Dámelo ya'. En esta etapa musicoexperimental de la Vuelta también volvieron Azul y Negro en 1993 con Two pa-ka. Una apropiación cultural entre los apaches, la samba, los ritmos africanos y el pop de los Pet Shop Boys.

En 1996, Ana Obregón y Ramón García, reyes indiscutibles de Televisión Española en los 90, sacaron un disco. Y fueron la banda sonora de la Vuelta ese mismo año. Apenas hay documentos audiovisuales que demuestren que esto realmente pasó y no es como el perro, la mermeladada y Ricky Martin, pero alguno queda. Como este megamix. Ay, la España cañí. En 1998, el eurodance llegó a las pistas españolas para quedarse y convivir con canciones como la anterior. Los holandeses Vengaboys vinieron para tomarse la justicia por su mano debido a lo ocurrido en 1996 y rompieron las discotecas con el 'Up & Down'. Al año siguiente, los organizadores de la Vuelta dieron un descanso a todos los teclistas y eligieron un tema con gaita mucho más autóctono pero con unas baterías interesantes, 'El garrotín' de Hevia.

Los 2000 empezaron con el temazo de OBK eurodance 'El cielo no entiende' que también fue utilizada para casi todo durante ese año. Las razones del Comité Musical de la Vuelta para elegir canción son tan místicas como épicas. La elección de 'Corazón Congelado' de Pastora Soler en 2001 -sí, la canción que habla de un supermercado, cuyo videoclip está rodado en un supermercado y la propia Pastora es cajera de ese supermercado- dio grandes momentos televisivos como este, en el que tienen que alargar el palmeo un minuto porque la letra en sí no va mucho con el ciclismo. Bueno, quizá "el envoltorio de plástico rosa, brillante, atractivo y helado" podría ser un maillot.

Patricia Manterola le dio ánimos a los ciclistas con 'Que el ritmo no pare' en 2002. En 2004, Melendi ponía la música con 'Con la luna llena' un año después de su debut en 2003 con 'Sin noticias de Holanda'. Otra banda que se dio a conocer, entre otras cosas, por la Vuelta fue Nena Daconte en 2006 con 'En qué estrella estará'. Mai Meneses, apenas había pasado desapercibida en la segunda edición de Operación Triunfo, pero este comeback en forma de banda fue el inicio de muchos éxitos. Y sí, aunque no os lo creáis, ninguna de estas canciones llevaba sintetizador. En 2007, en la línea de defensa del pop español que parecía abanderar la Vuelta, surgió Hanna. Si bien no tuvo mucha trayectoria musical, este tema pro-todo y anti-todo a la vez, le dio a la competición un toque intensito muy apropiado.

En 2008, Beatriz Luengo se lanzó en solitario demostrando que era mucho más que una ex-UPA Dance. Su primer largo, 'Carroussel' se presentó con 'Pretendo hablarte' que tuvo mucho éxito en Francia y actualmente se dedica allí profesionalmente a la música. Aunque la etapa de 'Un paso adelante' también dio momentos históricos. En 2009, después de varios proyectos y muchos escenarios, una no muy conocida Zahara lanzó 'La fabulosa historia de...' y 'Merezco' se convirtió en la banda sonora de la Vuelta. Una canción que le valió que le lanzaran un cubo de agua a la cara. Menos mal que la Vuelta se celebra en verano.

2010 y 2011 también fueron años para que las bandas emergentes sonaran durante tres semanas en la televisión pública. Primero fue el turno de Preciados con 'Otra oportunidad'. Les siguieron La Fe de Manuela con 'Como yo'. El experimento duró poco ya que en 2012 tomó el relevo La Oreja de Van Gogh, que si bien llevaban años como una de las bandas más importantes en español, estrenaban segundo disco con nueva cantante, 'Día Cero' también tenía ese toque épico que necesita una canción de Vuelta. Las gaitas volvieron en 2013 con 'Mambo' de Carlos Núñez, un mambo que sin embargo sonaba a Asturias más que a otra cosa. En 2014 a alguien se le ocurrió poner a Sara Baras taconeando.

2015 fue el año en el que TVE aprovechó al máximo los derechos de 'Amanecer' de Edurne, que pasó bastante desapercibida en el festival de Eurovisión de ese mismo año. Quizá, por ese orgullo tan español, se recicló para la canción para la Vuelta. Este año, la canción de la Vuelta la firma Marta Sánchez con 'El ganador'. Un tema EDM muy en la línea de la música electrónica actual que sorprende por su letra en español, no tanto por el socorrido sonido, que, sin embargo, cierra el círculo de la canción de la Vuelta como workout.

Si quieres repasar -casi- todas las canciones de la historia de la Vuelta Ciclista a España, puedes suscribirte a la playlist de gonzalieri en Spotify.

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