Es uno de los elementos más característicos de la madrileña Puerta del Sol. Cada día, decenas de personas quedan para encontrarse allí una vez salen de las estaciones de Metro o Renfe. Esta edificación, conocida como 'ballena', tiene los días contados. Con motivo de la remodelación de la Puerta del Sol, que pasará a estar totalmente peatonalizada, se retirará tras el primer trimestre del presente año.

De este modo, la estructura actual, presente desde el año 2009, dejará paso a una totalmente transparente. La explicación de este cambio, según indican fuentes municipales a Europa Press, es "liberar a la plaza de uno de los obstáculos que impedían una visión total del espacio". El inicio de las obras se espera una vez que sea sean aprobadas este mes de febrero por la Junta de Gobierno.

Pabellón de vidrio

En su lugar habrá un pabellón de vidrio con una forma oval, con lo que no se formarán ángulos que impidan la vista de los alrededores de la plaza. Su construcción se llevará a cabo únicamente con vidrio estructural, salvo una viga central de acero que estará apoyada en tres soportes del mismo material.

De acuerdo con El Mundo, la redacción de este proyecto ha sido "compleja", por lo que se ha necesitado el consenso de las áreas de Obras y Equipamientos, Medio Ambiente y Movilidad y Seguridad y Emergencias. A su vez, también tomado parte de la conversación el distrito de Centro, Adif, Metro de Madrid y la Dirección General de Patrimonio de la Comunidad de Madrid, puesto que la Puerta del Sol es un Bien de Interés Cultural (BIC).

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Una idea de años atrás

Esta renovación de la icónica plaza no es algo que salga de la nada: la idea es la propuesta ganadora del concurso Piensa Sol, convocado por el Ayuntamiento y el Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid (COAM) en el año 2014. El objetivo de éste era evaluar posibles problemas respecto a este espacio.

La propuesta fue presentada por los arquitectos José Ignacio Linazasoro y Ricardo Sánchez. Entonces quedó en el aire por el cambio en el gobierno de la región, pero ahora ha servido como una base para terminar de dar forma al proyecto definitivo. Desde el Consistorio consideran "necesario" realizar esta actualización para recuperar la estabilidad formal que tuvo la plaza en su origen. Esto se conseguiría con una "intervención discreta pero sutil".