La Universidad de Barcelona (UB), se ha visto envuelta en una enorme polémica tras haber sido relacionada con un estudio farmacológico con una fase de experimentación, en la que está previsto que 32 perros de la raza Beagle sean sacrificados. En un primer momento, el estudio se ubicó en el Parc Científic de Barcelona (PCB) para los próximos días, pero que más tarde se ha aclarado, está programado para una fecha posterior, y fuera de las fronteras catalanas.

La UB ha aclarado en un comunicado que el estudio está programado para el mes de marzo, y en conversaciones con El País, han afirmado que la fase de experimentación no tendrá lugar en el PCB, sino en las instalaciones de la empresa Vivotecnia, que participa en calidad de subcontrata tras ganar el concurso público, y que tiene su sede en la Comunidad de Madrid, en Tres Cantos más concretamente.

La consejera de Acción Climática de la Generalitat, Teresa Jordà, ha querido distanciar a Cataluña de este experimento, agregando en un hilo de Twitter un párrafo en el que explica que en esta Comunidad no se ha aprobado ningún tipo de experimentación relativa a este estudio: “En caso de que un proyecto se realice en Cataluña, debería de ser evaluado por la Comisión de Experimentación Animal”.

La pelota, en el tejado de la Comunidad de Madrid

Teresa Jordá ha expresado que como organismo, no han recibido ninguna petición o solicitud para realizar semejante experimento, pese a que a raíz de los rumores en relación a esta actividad, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, habría pedido mediante una carta que se evitase el sacrificio de los animales.

Pese a que la institución que se va a nutrir de dicho experimento en caso de que se lleve a cabo, como el lugar donde se va a realizar el trabajo experimental está ubicado en Madrid, es responsabilidad ahora, del ejecutivo de Díaz Ayuso, el conceder los pertinentes permisos para llevarlo a cabo. Por el momento, la UB no ha desmentido que dicha fase no vaya a concluir con el sacrificio de los 32 cachorros.

El historial de Vivotecnia

En abril del pasado año, la ONG Cruelty Free International, denunció gracias a unos vídeos de una extrabajadora de los laboratorios, los tratos vejatorios y de maltrato sufridos por los animales. En estas grabaciones se ve a trabajadores de la empresa interaccionando con animales como perros, ratones, conejos, cerdos y monos, mediante golpes, gestos bruscos, además de los insultos y risas que formaban parte de un carrusel de humillaciones vividas por los animales.

La extrabajadora comunicó a sus superiores dentro de Vivotecnia estas actitudes, una información que según ella, fue ignorada por los directivos. A raíz de los vídeos, la Comunidad de Madrid suspendió temporalmente la actividad de los laboratorios, aunque tras algo más de 1 mes, esta medida fue levantada tras considerarse que la empresa había tomado las medidas cautelares necesarias para evitar esto.

La misma ONG anunció a finales de 2021, que diversos organismos públicos, entre ellos la UB, seguían contratando los servicios de Vivotecnia, que continúa bajo investigación por los cargos de maltrato animal. Entre otros, el CSIC es el mejor cliente público de la empresa, depositando un ingreso cercano a los 800.000 euros para que la empresa realice trabajos de experimentación.

¿De qué trata el experimento?

Según el artículo publicado en El País, La Universidad de Barcelona, que contrató a Vivotecnia por 211.280 euros, ha argumentado que la investigación “busca desarrollar curas para enfermedades fibróticas y comporta el estudio histopatológico de los órganos de 32 perros de la raza Beagle”. Según argumenta el ente, la práctica con animales “es por ahora insustituible” a efectos de “garantizar el progreso científico”. Las universidades e instituciones públicas, agregaron, “están comprometidas a continuar trabajando para buscar alternativas a la experimentación con animales”. Por su parte, entidades animalistas como PACMA defienden que, según la normativa que regula la experimentación con animales, aquellos “que estén en buen estado al finalizar el estudio deben ser puestos en adopción, no sacrificados”, según subrayan en su comunicado.