Compran un Van Dyck por 77 euros
La obra llevada medio siglo en el salón de la casa de un historiador del arte británico. En el momento de la compra se pensaba que era una copia.
Corría el año 1970 cuando Christopher Wright, historiador de arte de origen británico, adquirió una copia de un cuadro de Anthony van Dyck, pintor flamenco nacido en Amberes en 1599 y dedicado especialmente a la elaboración de retratos. Comprado por apenas 65 libras (unos 77 euros al cambio), lo que en un primer momento apuntaba a una copia podría ser, en realidad, un original.
Tras medio siglo en el salón de su casa, ahora se conoce la posible originalidad de la obra. "Se lo compré a un comerciante en el oeste de Londres", reconoce el historiador a The Guardian. Hasta ahora había pasado desapercibida, cuando la visita de un curador del Museo Ashmolean de Oxford levantó las sospechas sobre su autenticidad.
Colin Harrison, curador principal de Arte Europeo, fue quien le advirtió de que podría tratarse de una obra original en lugar de una copia. "Me pareció que se trataba de un cuadro interesante y posiblemente bueno, y que era muy posible que lo hubiera pintado Van Dyck", revela el curador. Kendall Francis y Timothy McCall, del Courtauld Institute of Art de Londres, lo restauraron y concluyeron que en el taller de Van Dyck se llevaron a cabo retratos similares, y que en este caso "puede ser muy desafiante" saber la medida en la que participó el artista.
Retrato de una infanta de España
Lo que sí parecen tener claro los expertos es que "se puede atribuir al taller de Van Dyck, se completó durante su vida y bajo su supervisión entre 1628 y 1632". El cuadro en sí es un óleo sobre lienzo de 81,5 por 70,5 centímetros y representa a la infanta de España Isabel Clara Eugenia de Austria, también soberana de los Países Bajos, hija del rey Felipe II con su tercera esposa, Isabel de Valois.
La obra se habría llevado a cabo cuando el artista trabajaba como pintor de la corte del rey Carlos I (quien le otorgó el título de caballero), época en la que realizaba retratos de la infanta. En la obra aparece vestida de monja, reflejando el luto tras la muerte de su marido, el archiduque Alberto VII de Austria, en 1621.
De acuerdo con el historiador, la obra podría llegar a alcanzar un valor de 40.000 libras (48.000 euros). Una cifra estimada en función de otras obras del artista, que se llegaron a vender por un máximo de 130.000 dólares (114.000 euros). Su intención, no obstante, no es la de venderla, sino que la prestará al Cannon Hall Museum de Barnsley, que cuenta con numerosas pinturas holandesas y flamencas del siglo XVII, además de diversos muebles, cerámicas y cristalería.