Descubren un planeta que varía su temperatura de -80°C a 100°C en 35 días

Un grupo de astrónomos de la Universidad de Berna, en Suiza, han hallado un planeta extrasolar o exoplaneta, es decir que no pertenece al sistema solar, según el informe publicado el pasado 7 de enero en la revista The Astronomical Journal. Los primeros indicios del hallazgo establecen que este exoplaneta pertenece a la categoría sub-Neptuno, cuya trayectoria se asemeja a una estrella enana roja.

TOI-2257 b es el nombre elegido para este planeta extrasolar, que fue detectado por el telescopio espacial Tess del Satélite de Sondeo de Exoplanetas en Tránsito de la NASA, cuyo seguimiento se centró durante cuatro meses, con el objetivo de analizar su comportamiento y su actividad.

Principalmente, los primeros análisis extraídos y publicados indican que este exoplaneta pueda tener su propia vida. Por el momento, el informe manifiesta que la investigación no ha llegado a su fin y que este exoplaneta está siendo sometido a futuros estudios, con el objetivo de concluir la existencia de determinadas características, como es la aparición de vapor de agua dentro de su composición atmosférica.

¿Qué características muestra este planeta?

La proximidad del exoplaneta TOU-2257 b con su estrella pequeña muestra la posibilidad de la existencia de agua en estado líquido dentro de su superficie. Además, el tiempo que tarda en recorrer su órbita dura al menos 35 días. Sin embargo, es un planeta bastante gaseoso y con una alta presión atmosférica, que complica la habitabilidad de personas humanas, ya que su radio es más del doble que el registrado en la Tierra.

También, cabe destacar que, al no tener una órbita concéntrica circular, provoca que haya una modificación sustancial en las temperaturas durante todo su giro orbital, alrededor de una estrella fría, que jamás había sido encontrada, según detalla la doctora Nicole Schanche.

Además, la temperatura registrada de este exoplaneta puede variar desde los menos 80 grados hasta los 100 grados aproximadamente, según muestran los análisis del estudio, y cuya diferencia depende del lugar donde se encuentre el planeta dentro de la órbita, por lo que provoca una modificación de temperatura muy relevante.