Nueva Ley FP en 2022: ¿cuándo entra en vigor, cómo funciona y cuánto se cobra?
El Congreso aprobó este jueves la nueva ley de Formación Profesional, un texto más flexible, con más prácticas y que da mayor participación a las empresas.
El Congreso de los Diputados aprobó este jueves la nueva Ley de Formación Profesional, una norma impulsada por el Gobierno que unifica los dos sistemas de la FP dual (la educativa y la orientada al empleo), incluye más prácticas, más flexible y que contará con mayor participación de las empresas. El texto, tras ser aprobado en la Cámara Baja, ahora tendrá que ser tramitado y aprobado en el Senado, siendo el mes de marzo el momento que maneja el Ejecutivo para que la ley entre en vigor.
Uno de los principales retos de esta nueva ley de FP es asegurar la oferta de plazas públicas para todos aquellos interesados en cursar un módulo de formación profesional, toda vez que este verano miles de jóvenes se quedaron sin plazas estatales, especialmente en Cataluña y Madrid.
Demanda de trabajados con cualificación intermedia
El Gobierno ha explicado en repetidas ocasiones que considera imprescindible reconfigurar el mercado laboral, que presenta un exceso de trabajadores cualificaciones bajas pero tiene escasez de empleados medios. Por eso, impulsa esta ley de FP, puesto que las previsiones apuntan que España, en cuatro años, necesitará tener casi la mitad de sus puestos de trabajo (un 49%) cubierto con empleados de formación intermedia, la que otorga la FP. El texto redactado, que se convertirá en ley, en unos meses, tiene varias claves:
Claves de la nueva ley de Formación Profesional
- Flexibilidad de la oferta formativa: la nueva ley organizará la formación en cinco niveles, de la A a la E, de tal forma que diferencia dificultad y duración y se adapta a la necesidad de los trabajadores. No será necesario cursar un ciclo formativo completo, sino que se podrán realizar pequeñas formaciones y cursos de especialización.
- Papel de las empresas: serán determinantes y desempañarán un rol que nunca antes habían tenido. Tendrán la posibilidad de asumir como mínimo el 35% de la formación de un joven que elija hacer un módulo de FP, por lo que las prácticas en las empresas aumentarán, un aspecto muy demandado tanto por los estudiantes como las empresas que reciben al final de los estudios trabajadores sin la formación adecuada para realizar el trabajo ofertado.
- Sueldo: las prácticas en las empresas podrán ser remuneradas, tendrían contrato laboral, no estarían sujetos al horario escolar y cobrarían lo que determine en ese momento el salario mínimo interprofesional (en este momento 965 euros). Eso sí, este cambio no será inmediato, sino que las empresas tendrán hasta 2028 para adaptarse a estos contratos en sustitución de las becas actuales.
- FP dual: la formación seguirá siendo dual, es decir, continuará habiendo formación en las empresas, pero habrá dos tipos: la Dual General, en la que como hasta ahora el estudiantes realiza el 25-35% de su formación en empresas, sin que haya contrato ni remuneración; y por otro lado la Dual Intensiva, en la que la empresa asumirá del 35% al 50% de la formación y en este caso sí habrá contrato, nómina y cotización a la Seguridad Social.
- Internacionalización: la nueva ley busca que los alumnos se formen en una lengua extranjera e incluso ofrece la posibilidad de cursar prácticas en centros de trabajo de otros países.
- Sinergias con la universidad: se busca con este nuevo texto mayor relación entra la universidad y los ciclos formativos, un aspecto que ahora se echa en falta. Se impulsarán nuevos modelos de colaboración o desarrollo de proyectos de forma conjunta.
- Posibilidad de convalidar experiencia por títulos: el Ministerio de Educación también admitirá con esta ley que se pueda convalidar la experiencia obtenida en una empresa por títulos, de tal forma que un trabajador con experiencia demostrable en un sector pueda canjearla por un título.