Los servicios de Inteligencia de Estados Unidos aseguran que Rusia estaría considerando elevar su presencia militar en la frontera con Ucrania. Según reflejan varios medios norteamericanos, el objetivo sería invadir el país vecino a lo largo del próximo año, para lo que aumentarían sus efectivos hasta los 175.000 soldados.

"Rusia planea una ofensiva militar contra Ucrania tan pronto como a comienzos de 2022 con el doble de fuerza de lo que vimos esta primavera durante los ejercicios rusos de la pasada primavera cerca de la frontera ucraniana", asegura el diario Washington Post, el primer medio en acceder a esta información del servicio de inteligencia estadounidense.

Según la fuente de la administración citada por el medio americano, "los planes implican un amplio movimiento de 100 grupos tácticos de batallón, además de artillería, blindaje y equipamiento".

Movimientos recientes

Durante las últimas semanas desde Moscú se han movilizado tropas en la frontera con Ucrania, en el marco de una inquietud que va a más entre Washington y Kiev. Inteligencia de Estados Unidos asegura tener imágenes satélite de estos movimientos, que apuntan al traslado de cerca de 175.000 unidades de combate.

Una revelación que se produce justo en un momento el que el se anuncia una conversación telemática entre el presidente estadounidense, Joe Biden, y el ruso, Vladimir Putin. El pasado viernes, Biden aseguró que se estaban preparando "una serie medidas" para defender a Ucrania en caso de que se lanzara desde Rusia una ofensiva militar.

De acuerdo con el documento al que tuvo acceso Washington Post, las fuerzas rusas se concentran en cuatro lugares, en los que están desplegados 50 grupos tácticos de combate, además de tanques y artillería "recién llegados". Las evaluaciones desde Ucrania indican que son unos 94.000 los soldados rusos en la frontera, mientras que EE.UU. estima unos 70.000, que podrían incrementarse hasta los 175.000.

Ucrania y la OTAN

El país ucraniano considera unirse a la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte) como un mecanismo de defensa ante la amenaza reciente del Kremlin. A su vez, el secretario de Estado, Antony Blinken, advirtió de que Washington y sus aliados penalizarían a Moscú con grandes sanciones económicas si ataca a Ucrania, tras reunirse en Estocolmo con el ministerio de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov. "No sabemos si el presidente Putin ha tomado la decisión de invadir. Sabemos que está poniendo en marcha la capacidad para hacerlo a corto plazo si así lo decide", dijo Blinken.