La Red de Vigilancia del Genoma Sudáfrica (NGS-SA, en sus siglas en inglés) presentó el miércoles por la tarde los primeros resultados de su estudio de la variante Ómicron ante la Comisión de Salud del Parlamento del país. Pese a que es muy pronto para hablar con certeza en muchos de los aspectos relacionados con la nueva mutación que se expande desde el norte de África, los primeros avances ya determinan y ofrecen indicios de algunas de las dudas razonables que están surgiendo.

Las principales preocupaciones en cuanto a la variante Ómicron son la transmisibilidad y el efecto con respecto a la vacuna, y pese a que los expertos aseguran que la genética de esta nueva cepa es muy diferente a las variantes previas, se puede asegurar en un alto grado que las vacunas son la herramienta que puede impedir que la enfermedad sea grave y se precise de hospitalización. La gran incógnita aún por resolver es si el periodo de incubación continúa siendo de 5 días de media como hasta ahora.

Según las declaraciones que recoge El País en uno de sus artículos, Richard Lessells, experto en enfermedades transmisibles, señaló una de las razones principales por las que alertan estas mutaciones: “Nos preocupa no tanto el número de mutaciones, sino dónde se concentran, porque muchas lo hacen en la proteína de pico, y en concreto en partes clave, importantes en el acceso a nuestras células. No sabemos si los anticuerpos podrán con ellas”. Lessels pone sobre la mesa la duda acerca de la peligrosidad de esta variante, ya que debido a la tendencia de los rangos de edad de los infectados y la condición de vacunación, existe una generalidad de sintomatología leve, pero que podría ser una falsa imagen debido a estos factores.

Datos confirmados tras el estudio

Destacan varias conclusiones que se muestran tras esta primera toma de contacto con los estudios de Ómicron: la transmisibilidad es mayor; las vacunas, aunque la variante está afectando a pacientes con la pauta completa, evitan la hospitalización; el riesgo de reinfección es mayor; el efecto de la medicación (Dexametasona) no se altera porque esta no trata el virus sino que calma los síntomas. Ahora se comienza a diversificar datos por rangos de edad, al haberse contagiado sobre todo jóvenes de entre 20 y 39 años con mayor capacidad inmunológica para resistir la covid-19, no pueden concluir nada por el momento en cuanto ala gravedad del proceso vírico a nivel general.

Una de las grandes noticias, es que la variante Ómicron se sigue detectando de igual forma y mediante los mismos métodos que el resto de cepas relacionadas con la COVID-19, es decir, la prueba PCR es capaz de detectarla sin necesidad de realizar la secuenciación del genoma. “Una de las tres señales u objetivos en la PCR da negativa, las otras dos positivas, por lo que el test sigue dando positivo pero se observa algo diferente", aclaró Lessells.

Llamamiento de la OMS

Tras la aparición de los primeros casos de una nueva variante en el cono sur de África, Maria Neira, presidenta de Salud Pública de la OMS, pedía a la población tres pautas: "prevención, vacunación y anticipación", tres factores que siguen siendo muy relevantes tras los primeros hallazgos con respecto a esta nueva variante, de la que ya conocemos contagios comunitarios en nuestro país.