Amanda Melián es una de las tantas personas que han perdido su vivienda a lo largo de los más de dos meses que lleva el volcán Cumbre Vieja en erupción. Esta mujer, que vivía en el Valle de Aridane, era la propietaria de una casa cuya imagen actual ha dado la vuelta al mundo. Una vivienda cubierta de ceniza de la que, a escasos metros, surgió una boca de lava.

"Cada día pendiente, sufriendo, pensando hoy nos toca. Cuando vi la foto no me lo podía creer, en ese momento uno se derrumba. ¿Quién iba a pensar que eso iba a salir ahí?", confesaba en una entrevista con la Cadena SER el pasado lunes. La palmera se enteró del estado de su casa gracias a una foto que dio la vuelta al mundo.

Medios de comunicación de todo el mundo se hicieron eco de la noticia de que una nueva boca eruptiva había aparecido justo donde se ubica la casa de Amanda. La boca de lava expulsada por esa figura fue, además, la que provocó que el cementerio de Las Manchas fuera engullido, un terreno que hasta entonces se había mantenido intacto.

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Rubén López, volcanólogo del Instituto de Geografía Nacional, enseñaba el pasado sábado la imagen captada por el 1-1-2 donde se veía con mayor detalle cómo se había abierto una nueva boca a las puertas de dicha vivienda. "Centro de emisión de la colada sur que emitió la colada de Las Manchas el jueves. Se aprecia perfectamente la apertura del conducto a la misma puerta de una vivienda. Instantánea tomada de un vídeo del 112", compartió el experto.

Dos conos emitiendo lava

Este martes, durante varias horas, el cono principal del volcán de La Palma dejó de emitir ceniza, aunque finalmente recuperó su actividad. Además, hace días se formó un nuevo cono debido a la acumulación de piroclastos. Este cono secundario, que ha tenido varios derrumbes asociados a desbordes, emite una lava que aún no ha invadido más territorio que el ya arrasado por el principal, ya que discurre hacia el norte y al centro de coladas más antiguas.

La sismicidad del volcán sigue incrementándose en profundidades intermedias, con más relevancia, y altas, llegándose a registrar más de 340 terremotos en las últimas horas, una de las cifras más altas desde que entró en erupción el volcán, según ha informado el IGN. El de mayor intensidad ha sido de 4,8 localizado a 37 kilómetros de profundidad. Además, la calidad del aire se mantiene en un nivel razonablemente bueno La superficie afectada se mantiene en 1.134 hectáreas y, según Copernicus, 2.860 construcciones se han visto afectadas.