Un mensaje escondido desde 1974, y con un final de película de tarde. Cuatro obreros de Newcastle estaban construyendo una vivienda, e iban apuntando la realidad de su día a día, en este caso escriben lo que les deben: 106 dólares. 

Escondieron el mensaje en una botella, detrás de una pared, y ahí ha estado escondido hasta que unas obras en casa han sacado a la luz los nombres completos de los obreros, y el día a día de su trabajo en Australia. 

Una historia feliz

El dueño actual de la vivienda, Matt Streatfeild, al encontrar la vivienda, compartió la imagen de dónde estaba escondido, y también del contenido del mensaje. Su idea, buscar a alguno de los herederos, o tal vez a los autores de la obra en su casa.

Matt Streatfeild ha podido localizar a uno de los autores, Ron Niddrie, gracias a que los trabajadores pusieron en ella sus nombres y las fechas de nacimiento, para llevar todo en orden.  "Uno de estos pequeños recuerdos ha dado sus frutos. El hecho de que fuera hace 47 años fue aún más impactante".

"Siempre escuchas la leyenda de los mensajes en una botella, pero nunca piensas que encontrarás uno entre dos paredes en tu propia casa", dijo Streatfeild a NBN News. El nuevo dueño de la vivienda ha dicho que cuando termine la obra que está preparando, volverá a dejar la botella y el mensaje donde estaba.

Dice, además, que añadirá su propia historia, como la pandemia, y lo que ha ocurrido estos años. Un mensaje doble para los siguientes que encuentren la botella en la costa norte de Nueva Gales del Sur.