La localidad italiana de Conegliano, en el Véneto, ha visto como uno de sus símbolos locales más antiguos, de 47 años, recordado por jóvenes y mayores, ha desaparecido. Era un Lancia Fulvia que llevaba aparcado en el mismo lugar 47 años. 

El dueño del vehículo, Mario Baccaglini, se rompió la cadera hace dos años y ya no regenta el negocio de venta de prensa. Su coche, que utilizaba como almacenaje de revistas y periódicos no vendidos, y para recibir los nuevos, formará ahora parte de la feria de coches clásicos local.

El Ayuntamiento quería retirar el coche desde hace años, esa vía donde estaba aparcado ya no está disponible para los vehículos, por lo que además suponía un riesgo. Las protestas vecinales por retirar un símbolo que consideraban ya todos de la ciudad se han convertido en un homenaje a un Lancia clásico de 1962.

Ya no será un coche aparcado sin más. Ya no será un vehículo - kiosco de prensa. Hubo algunas ideas para que fuera llevado a una zona mejor de la ciudad a modo de escultura y estuviera rodeado de flores y vegetación. Pero, finalmente, pasará a formar parte de la exhibición de vehículos clásicos.